La Asociación de Creadores de Moda de España (Acme) ha cuantificado que, entre abril y junio, las pérdidas en este sector por la crisis del coronavirus pueden llegar a los 360 millones de euros. Con todo, la entidad ha publicado en su Instagram que, más allá de Inditex, que ha donado ya 10 mil mascarillas protectoras y tiene previsto enviar 300 mil de las quirúrgicas, son muchos los diseñadores que están prestando sus talleres e incluso produciendo este material sanitario.

Así, según ha explicado a la Agencia Efe Pepa Bueno, directora de la organización, están manos a esta obra firmas como Andrés Sardá, especializada en lencería y baño; Reliquiae, centrada en marroquinería; Dolores Cortés, especializada en baño; y Juana Martín, prêt-à-porter y costura, han ofrecido sus fábricas y talleres en Barcelona, Gijón y Córdoba para trabajar en lo que sea necesario. También se ha involucrado en el movimiento la Asociación de Atención a la Mujer Prostituida (APRAMP), que cuenta con el apoyo del diseñador Ulises Mérida, que, como Ion Fiz, han llamado ya a los talleres con los que trabajan para empezar a hacer las mascarillas. Por su parte, la joyera Helena Rohner ha contactado con el equipo de Comme des Machines con el que trabaja, un taller especializado en impresión 3D.

De acuerdo con el Ministerio de Sanidad, “la población general sana no necesita utilizar mascarillas”, puesto que éstas “ayudan a prevenir la transmisión del virus si las llevan las personas que están enfermas”. Por su parte, señala el organismo gubernamental, “los profesionales sanitarios indicarán el uso de mascarillas en aquellas situaciones en las que se considere necesario en cada caso”. Y advierte de que “un uso inadecuado de mascarillas” puede contribuir a su desabastecimiento “en aquellas situaciones paralas que están indicadas”.