Según una encuesta que ha realizado Greenpeace, el cambio climático ya está entre nuestras preocupaciones más importantes, en el 55,8% de las ocasiones (1821 personas) se marcó entre los temas que más los preocupan. Y esta prioridad ha tenido su reflejo en las elecciones europeas del pasado domingo. Se ha extendido en el continente una marea verde en el continente marcada por un gran ascenso de Los Verdes, que han subido de sexta a cuarta fuerza parlamentaria, gracias a los buenos resultados que el grupo ha obtenido en Francia, Irlanda, Dinamarca y Alemania, donde los ecologistas han desbancado a socialdemócratas como segunda fuerza; mientras que en Francia han subido al tercer puesto con 13 escaños.     

Esta fuerza electoral se atribuye también en parte al movimiento Fridays for Future, que reclama medidas urgentes para proteger el medio ambiente, y ha exhibido fuerza sobre todo en los países donde nació, en el norte de Europa. Y en Alemania, Los Verdes logran así un papel clave en la formación de mayorías en el hemiciclo, y podrán aspirar a cargos en el nuevo reparto de presidencias de las instituciones europeas.