El humorista Quequé contestó con un editorial en su programa, Hora Veintipico, al magistrado Carlos Valle, encargado de juzgarle por hacer una broma sobre dinamitar el Valle de los Caídos, después de que el juez comparase este lugar con la Plaza de Pedro Zerolo, algo que, a juicio del cómico, "debería hacerle replantearse su profesión si no ve la diferencia entre ambas bromas".

En el programa, mostraron la grabación del tribunal donde se veía al magistrado haciendo esta comparación. Carlos Valle le dijo al presentador que se imaginara, "aunque fuera en un programa de humor", que se dijera "a ver si volamos la plaza de Pedro Zerolo y, con las piedrecitas llegamos al día del Orgullo, y se las tiramos a todos los homosexuales que han abusado de niños", y apostilló: "Es decir, a todos los homosexuales".

"El contexto es fundamental, un programa de humor es un programa de humor. Si alguien se toma esto al pie de la letra, no está entendiendo la comedia", respondió Héctor de Miguel ante este comentario, además de dejar patente que comparar a Pedro Zerolo con la cruz del Valle de los Caídos no le parecía una buena idea. "Yo le acepto la comparación, pero desde luego... Lo importante siempre es el contexto", señaló.

"Yo no le comparaba a Pedro Zerolo con la cruz del Valle de los Caídos. Le hablaba de la plaza de Pedro Zerolo, de volar una plaza, no de comparar una persona con una religión", explicó el juez, un matiz que Quequé ya había entendido, pero seguía sin valorar positivamente la comparativa: "Por supuesto, pero comparar lo que significa la plaza de Pedro Zerolo con lo que significa la cruz...".

"Los abusones del patio"

El cómico afeó que para el juez sea comparable "un símbolo del franquismo, un régimen que persiguió y torturó a miles de personas, también a muchos homosexuales, que una plaza dedicada a alguien que luchó por los derechos del colectivo LGTBI".

El humorista considera, además, que esta comparación no fue espontánea, sino que vino "preparada de casa". "La usó para encajar eso tan habitual en el pensamiento de la extrema derecha que es asociar la homosexualidad a la pederastia", argumentó.

"Como chiste, flojo y de mal gusto", lamentó Quequé en su programa, donde también apuntó que su broma era una crítica a "varias estructuras opresoras" y a los "curas pederastas y a aquellos que acosan a las mujeres que van a abortar". Sin embargo, a su modo de ver, la comparación del juez se trató de "una muestra de cómo en un juzgado toma partido por la posición que la iglesia ha mantenido durante varias décadas: proteger a los abusadores en vez de a las víctimas".

"No es lo mismo burlarse de los opresores que incitar a la violencia contra los oprimidos. Aparte, yo soy cómico, no imparto justicia ni decido sobre la vida de otras personas. Usted sí y, que alguien con ese poder haga comentarios que incitan al odio contra los homosexuales, no en programa de humor, en un juzgado, es grave y preocupante", le espetó.

"Si usted no ve la diferencia entre su broma y la mía, quizá debería replantearse su profesión, porque la justicia no es solo aplicar unas normas, es entender el contexto y el impacto de las palabras y las acciones. Su chiste no tiene ni puta gracia", defendió.

"¿Sabéis por qué se permite esta mierda de comparación? Porque se sabe intocable. ¿Quién le va a sancionar, otro juez? Tenemos un problemita con los jueces. Igual que habría que hacer algo. Porque algunos jueces son los abusones del patio de la democracia. Yo cada vez tengo más claro que a mí me están usando para dar ejemplo", opinó.

La respuesta de las redes sociales ha sido casi uniforme en apoyo al cómico.

 

 

 

 

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