Alessandro Lequio ha participado este semana en el programa de Ana Rosa Quintana, donde ha contando una anécdota relacionada con el rey emérito, Juan Carlos I.

Según el ex de Ana Obregón, sonó el teléfono en su casa cuando tenía 17 años. Al otro lado estaba el rey de España: "Empecé a escucharle llorar como nunca por la novia que tenía en ese momento", confiesa.

El propio Lequio se atrevió a poner nombre a dicha amante: Barbara Rey. Según él, "el rey se enamoraba como un loco" además de que "lloraba como un niño. Ni yo lloraba así en esa época".

Estas declaraciones conciden con la entrevista a Corinna zu Sayn-Wittgenstein en un documental británico. Según ella los 65 millones que le dio era un "regalo generoso" porque era "muy inflexible a la hora de cuidar de ella". Además, ha añadido que "no fue algo excesivo" así como que Juan Carlos "es el arquitecto de sus problemas". Sobre el millonario regalo, Corinna lo analiza así: "Cuando finalmente llegó el regalo, obviamente me sorprendió porque era una suma muy generosa". Sin embargo, para ella  "en el contexto de un patrimonio neto estimado por Forbes en alrededor de 1.800 millones, no es una cantidad de dinero irrazonable".