El agitador ultra Bertrand Ndongo ha vuelto a dar rienda suelta a su machismo para meterse con una persona contraria a él ideológicamente. Esta vez el flanco de sus ataques ha sido la periodista de RTVE, Silvia Intxaurrondo, a quien ha calificado vía redes sociales como la “putilla periodística de Moncloa” a raíz de unas informaciones publicadas por el diario El Mundo relativas al salario de la informadora de la cadena pública.
La noticia escrita por el medio mencionada explica que la Justicia ha desestimado una demanda interpuesta por Intxaurrondo contra el director del periódico, Joaquín Manso, y el grupo al que pertenece el diario -Unidad Editorial- por un artículo titulado RTVE renovó a Silvia Intxaurrondo por 537.000 euros el mismo día de su dura entrevista a Alberto Núñez Feijóo. La resolución obliga a la periodista a hacerse cargo de las costas por, indican las líneas, la manifiesta falta de fundamento de su pretensión.
Acoso a Ana Pardo de Vera
El activista de Vox vuelve a las andadas apenas unos días después de su acoso a otra periodista, Ana Pardo de Vera, directora corporativa y de relaciones institucionales del diario Público, que tuvo lugar el pasado 8 de enero en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía durante el acto conmemorativo por los 50 años del fin de la dictadura franquista organizado por el Gobierno de España.
Pardo de Vera, que denunció los hechos, señaló que mientras se encontraba en un corrillo con otros compañeros de profesión y el secretario general de Comisiones Obreras (CCOO), Unai Sordo, el ultraderechista les abordó “de forma invasiva” y empezó a grabar y a faltarles el respeto.
"¿A quién vas a chupársela hoy?"
La Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) ha concedido el amparo solicitado por la directora de Público e indica en un comunicado que “según los testigos, cuando Ana Pardo de Vera le pidió que se apartara, le dijo ‘¿a quién vas a chupársela hoy, como siempre?’, señalando a la periodista, que le quitó el micrófono y lo tiró, lo que originó un amago de agresión que fue evitada por varios de sus colegas y personal de seguridad presentes”.
Asimismo, la FAPE recuerda que Pardo de Vera ha denunciado que las imágenes difundidas posteriormente han sido manipuladas, dejando fuera de ellas las referidas a estos insultos, remachando que “la inexistencia de otras grabaciones imposibilita el contraste de informaciones”.
“El periodismo consiste en garantizar con honestidad el derecho ciudadano a recibir una información veraz, no en provocar enfrentamientos entre profesionales e impedir el ejercicio de los compañeros con actuaciones intimidatorias”, deja claro la Federación de Asociaciones de Periodistas a la vez que reniega de “este tipo de hostigamientos y acosos que no hacen otra cosa que desprestigiar la profesión”.
En este sentido, ha pedido a los compañeros de profesión que “eviten en lo posible entrar en la dinámica de provocación que pretenden quienes no ejercen el periodismo y buscan el enfrentamiento”.
También se refieren a las palabras de la periodista después de que ésta señalara que “hay que ser tonto para ser negro y ser fascista” al considerarlas “fuera de lugar, aunque fueran fruto del agobio del momento” así como que le quitara el micrófono y se lo tirara al suelo.
Por el contrario, no considera que quepa el amparo a Ndongo solicitado por él a título individual y por Periodista Digital, “toda vez que actuó como agitador irrumpiendo e interrumpiendo la labor de los periodistas que estaba con Unai Sordo y no como periodista, por lo que no ha habido vulneración del derecho a ejercer la profesión”.