Las utilidades de los beacons pueden ser muy importantes desde un punto de vista empresarial. (FOTO: www.estimote.com)


Los smartphones, además de los inconvenientes que generan por la dependencia que demostramos hacia ellos, también presentan usos útiles derivados de las posibilidades que ofrecen para la vida cotidiana. Uno de ellos es la geolocalización vía GPS. Sin embargo, hay situaciones que las nuevas tecnologías no han resuelto desde el principio, y entre ellas se encuentra la pérdida de esa señal en lugares cerrados como garajes o puntos determinados de centros comerciales.


Desde hace un tiempo en EEUU han resuelto parte de este problema a través de unos pequeños dispositivos que para algunos son precursores de la geolocalización indoor. Son los beacons. En España se presentaron hace meses pero se espera que sea a lo largo de este año cuando se produzca su impulso definitivo. Así lo asegura Carlos Rodríguez, CEO de Quadram, empresa dedicada al desarrollo de aplicaciones que explora las múltiples opciones que estas pequeñas balizas pueden encerrar para el mundo empresarial y comercial, a través de su combinación con apps para dispositivos móviles.

A grandes rasgos ¿Qué son los beacons?
Son unos pequeños dispositivos basados en tecnología Bluetooth que funcionan como si fueran balizas (esta es además su traducción). En cuanto a sus usos, permiten una comunicación a través de esta vía con otros dispositivos, por ejemplo con los smartphones. Casi siempre llevamos los smartphone en el bolsillo y con los beacons y su combinación con las nuevas tecnologías aplicadas a dispositivos móviles a través de apps, podemos extraer beneficios desde un punto de vista empresarial.

Para aclarar conceptos, no hablamos de cobertura...
No. Con los Beacons nos referimos a geolocalización

Y esto ¿en qué se traduce?
Pues en lo que podríamos llamar geolocalización indoor. Es decir, estamos habituados a tener GPS en nuestros móviles y utilizamos este sistema. El problema surge cuando en lugares cerrados, un centro comercial cerrado o un parking, nos quedamos sin esa señal. Los beacon, permiten sincronizar el móvil con ese dispositivo y conocer con exactitud a qué distancia de ese lugar estás. Si además tengo varias balizas de este tipo, también te puedo ofrecer información más que útil desde muchos puntos de vista.

¿Un ejemplo de este tipo de usos?
Imagínate que estás en una galería de arte o un museo. A través de este sistema puedo saber si te encuentras frente al cuadro 1 o la escultura 2. Sabiendo exactamente tu posición puedo transmitir información del lugar por el que estás pasando.

Los beacons pueden tener diferentes tamaños (FOTO: estimote.com)



Muchos dirán que algo así lo ofrece ya el sistema NFC (Near Field Communications)
Podríamos decir que es similar pero con una diferencia fundamental. El NFC no permite establecer un diálogo entre dos dispositivos, la comunicación es unidireccional. Sin embargo, los Beacons sí porque si estás en el museo y sé en qué sala del museo te encuentras, te puedo pasar información acerca del cuadro al que puedes ir a continuación. Esto abre unas posibilidades enormes desde un punto de vista comercial porque en una gran superficie, por ejemplo, sé si estás en la zona de calzado y a la que te diriges. Así puedes acceder a ofertas cruzadas.

Siempre que hablamos de conexión inalámbrica surgen las dudas en torno a la seguridad...
Estos dispositivos, es decir, los beacons son, por decirlo de alguna manera, tontos. No establecen comunicación con otro sistema, o mueven datos, lo único que hacen es decir que estás ahí. En realidad, el que juega con los datos es tu Smartphone. Estas balizas no comparten información, no hacen nada, pero del uso que hagas tú de las aplicaciones que se sirven de los Beacons ya es cosa tuya.

Y con todas esas posibilidades que ofrecen ¿Por qué parece que no llegan a España aunque en EEUU estén bastante implantados?
No estoy de acuerdo. En nuestro país también tiene bastante presencia, es verdad que no tanta como allí, pero sorprendería lo mucho que ya se utilizan los beacons. Sin ir más lejos, nosotros a través de Quadram, trabajamos en dos grandes proyectos, uno para una universidad y otro para una gran cervecera.

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El cine se adelante a la realidad y estas escenas de Minority Report parece que recuerdan, salvando las distancias, ¿a lo que ofrecen los beacons?

Intuimos que los Beacons llegan a España para quedarse, sobre todo muy cerca de sector empresarial. El objetivo es buscar el beneficio comercial a través de la interacción con el cliente. En definitiva, a través de estos pequeños dispositivos, cuyo tamaño se aproxima al de una moneda y su coste es bastante reducido, muchos empresarios encontrarán la manera de fijar un canal de contacto permanente con el cliente, mediante el cual, además, conocerán sus gustos, promocionarán sus productos y les harán llegar ofertas... desde el mismo lugar en el que se encuentran, claro.

Como siempre, todo dependerá de la implantación y desarrollo de aplicaciones que den sentido a estas balizas y, visto lo visto, Quadram parece que está en el camino de hacerlas imprescindibles, tanto para empresas, como para clientes.