Era un secreto a voces que se multiplica por mucho debido al efecto expansivo de las redes sociales y, finalmente, Samsung se ha visto en la obligación de tomar una medida drástica: posponer el lanzamiento del Galaxy Fold, es decir, su smartphone plegable.

A esta situación se ha llegado después de que usuarios que estaban probando el dispositivo dieran cuenta de diferentes problemas. La compañía coreana ha adoptado esta decisión con el objetivo de realizar diferentes pruebas al nuevo dispositivo. Todo lo ha anunciado a través de un comunicado.

En el mismo, el gigante tecnológico adelanta que en próximas semanas dirá cuál es la fecha elegida para lanzar un gadget que los seguidores más friquis de la marca esperan desde que fuera anunciado por vez primera de forma oficial a principios de noviembre bajo el nombre de Infinity Flex Display y confirmado en febrero pasado ya con la denominación de Galaxy Fold.

Transparencia informativa

Sin duda alguna, Samsung opta, tal vez por lo ocurrido con el Note 7, por tomar esta decisión para evitar males mayores en un futuro próximo. Esto es, al menos, lo que se desprende de lo que ha anunciado, acompañado por una política de transparencia en el comunicado público al indicar, entre otras cosas, que si bien “muchas de las personas que han probado este nuevo dispositivo han destacado su gran potencial”, otras han puesto de manifiesto que “necesita algunas mejoras adicionales para garantizar la mejor experiencia de usuario posible”.

Varios de esos dispositivos también fueron enviados a periodistas de diferentes medios internacionales que enseguida comprobaron, tras un día de uso presentaban bultos, problemas en la definición de la pantalla cuando no su rotura completa.

Incluso apunta al que puede ser origen de los problemas tras “los resultados iniciales del análisis de las incidencias en las pantallas” que podrían deberse a “impactos en las áreas más expuestas de la bisagra”, es decir, “su parte superior e inferior”.

Llega la compañía a reconocer que también le han reportado “un incidente en el que sustancias encontradas dentro del dispositivo afectaron al rendimiento de la pantalla”.

Es decir, Samsung hace un ejercicio de 'abrir puertas' –evidentemente hasta donde quiere y se puede- lo que provocará un incremento de las expectativas por parte de los usuarios cuando se anuncie la nueva fecha de lanzamiento.

Olvidando el Note 7

Lo que queda a partir de ahora, además de anular hasta nuevo día el evento de presentación previsto para mañana miércoles en el que Samsung España iba a anunciar oficialmente el Galaxy Fold en España, es esperar los datos finales de las pesquisas que realiza la empresa surcoreana para extraer conclusiones y corregir los problemas.

Parece evidente que esta nueva forma de actuar entierra la seguida en los casos de incendios del Note 7, con decisiones precipitadas, cierto oscurantismo e información poco clara que se tradujo en un golpe importante para el prestigio de una de las compañías del sector más importantes del mundo.

La nueva política, además, parece dar sus frutos y, sin ir más lejos, según informaban al inicio de este martes algunos medios especializados, en las primeras horas las acciones de Samsung Electronics en la bolsa de Seúl no sufrieron las consecuencias de esta medida drástica. Veremos la evolución.