La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha emitido un mensaje de alerta en Twitter dirigido a trabajadores y empresas ante la amenaza de una nueva DANA que podría afectar a distintas zonas del país.

La ministra ha recordado a los trabajadores que, si la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) o los servicios autonómicos emiten alertas naranjas o rojas, cuentan con el derecho de no acudir a sus puestos de trabajo si ello supone un riesgo para su seguridad o salud. Díaz ha subrayado que, en estos casos de emergencia meteorológica, las empresas deben priorizar el bienestar y la seguridad de sus trabajadores, y por tanto, tomar todas las medidas necesarias para asegurar su protección.

En esta publicación, la ministra ha explicado que el Real Decreto-ley 4/2023 establece que, cuando se producen estas alertas meteorológicas graves, las empresas están obligadas a adaptar las condiciones de trabajo para garantizar la seguridad a sus empleados. Estas medidas pueden incluir ajustes de horarios o, en casos extremos como los que han ocurrido recientemente, permitir la ausencia de los trabajadores en sus puestos laborales.

La vicepresidenta ha puntualizado en varias ocasiones que este mensaje no es solo una recomendación, sino que se trata de una obligación para que las empresas garanticen el derecho de protección a sus trabajadores.

"Las empresas deben entender que la seguridad de sus empleados va primero", recalca Yolanda Díaz.

 

Derecho a la seguridad en situaciones extremas

Además, la misnitra ha hecho hincapié en que todos los trabajadores han de estar alerta, ya que a veces pueden sentirse presionados a acudir a sus puestos pese a las condiciones tan preligrosas.

Ya se han registrado casos de denuncias por parte de trabajadores despedidos debido a las dificultades para llegar a sus puestos de trabajo a causa de estas adversidades climáticas. En situaciones como estas, es fundamental que los trabajadores sepan que cuentan con respaldo legal y que tienen derecho a priorizar su seguridad.

"Me llama mi jefe, hoy a las siete de la mañana, muy disgustado, diciéndome que por qué no estoy en mi puesto de trabajo, que me busque la vida", declara Fabián, un ciudadano afectado por la DANA, cuyo coche quedó totalmente destruido.