La pandemia del Covid‐19 conlleva una crisis económica y social que va a tener graves efectos, no sólo en las personas en riesgo de pobreza o exclusión social, y que no podemos obviar con motivo de la celebración del Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza

Personas y hogares que, por su perfil, tradicionalmente no se encontrarían en esta situación, se están viendo afectados negativamente con  pérdidas de rentas e ingresos. Los últimos datos publicados (2019) nos proyectaban una situación social y económica bastante preocupante, en la que se encontraban millones de personas en riesgo de pobreza o exclusión social.

Uno de cada seis hogares españoles (17%) tenían unos ingresos mensuales menores a 1.000 € y el 20,7% de la población continuaba en riesgo de pobreza o exclusión social. Cerca del 4% de los hogares no podían permitirse una alimentación adecuada ni el 7,6% de los mismos podía  mantener su vivienda a una temperatura adecuada. Sin olvidar la alarmante la situación de 2,46 millones de niñas y niños en riesgo de pobreza y exclusión social. 

Estrategia fracasada 

Evidentemente, no se ha cumplido el objetivo fijado en la Estrategia 2020 de luchar contra la  pobreza  y  la  exclusión  social  reduciendo  el  número  de  personas  que  viven  por  debajo  del  umbral  de  pobreza.  Incluso  el  Relator  especial  de  la  ONU  para  la  pobreza  extrema,  en  su  informe  final,  ha  puesto  de  manifiesto  que  nuestros  programas  de  protección  social  son  insuficientes y dejan fuera del sistema a personas en situación de pobreza. 

Nuestro país es el sexto país más desigual de Europa, con un 26,1% de personas en riesgo de  pobreza  y  exclusión, a lo que tenemos que unir  la  progresiva  pérdida  de  cobertura  de  los  servicios públicos y el deterioro de nuestro estado de bienestar. Las consecuencias del COVID‐19 pueden ser devastadoras sin los instrumentos adecuados, con graves efectos tanto a medio como a largo  plazo.

UGT considera urgente la puesta en marcha de la Estrategia Nacional de Prevención y Lucha contra la Pobreza, en cuya elaboración participa activamente, junto con el desarrollo de la misma a través de planes operativos. Para el sindicato es fundamental  el  fortalecimiento  de  los  servicios  sociales,  concretamente  ampliar  la  cobertura  del  sistema  de  rentas  mínimas  de  inserción. 

En  este  sentido,  es  necesario  recordar  que  UGT,  conjuntamente  con  CCOO,  presentó en el  Congreso  de  los Diputados una Iniciativa  Legislativa  Popular  (ILP)  para la creación de una prestación de ingresos mínimos cuyo objetivo era garantizar ingresos adecuados a las personas  que,  teniendo  disponibilidad  para  trabajar,  carecen  de  empleo  y  de  unos  recursos  económicos  mínimos para ellas y sus familias. 

Potente inyección de gasto público social

"Reivindicamos efectuar, sin más dilación, una potente inyección de gasto público social para hacer frente a las situaciones de pobreza existentes o que se puedan originar, blindando este sistema público de protección; y que en los próximos Presupuestos Generales del Estado se preste una especial atención a las personas más  vulnerables, reforzando  las  partidas  económicas  de  los  programas  de  servicios  sociales  con  el  objetivo  de  evitar el empeoramiento de las situaciones de pobreza existentes o el origen de otras, y paliar los efectos de  esta crisis socioeconómica", solicita el sindicato. 

UGT considera necesario avanzar hacia un sistema sólido y eficaz de protección social, garantista del ejercicio de derechos económicos y sociales, para lo que hay que aumentar la inversión pública e impulsar las reformas  necesarias para luchar contra la desigualdad, la pobreza y la exclusión social.