El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes el límite de gasto no financiero, el conocido como techo de gasto, para 2019 que asciende a 125.064 millones de euros, un 4,4% más que en 2018 (situado en 119.834 millones). El aumento refleja que entre las prioridades del Gobierno va a estar el déficit y la deuda pública, pero, también, el reforzamiento de un modelo social basado en la cohesión social, la lucha contra la desigualdad y la sostenibilidad.

UGT ha valorado positivamente el anuncio del Consejo de Ministros porque, según dice el sindicato en un comunicado, se debe "resituar al Estado de Bienestar como eje central de un modelo de crecimiento en el que los servicios públicos fundamentales constituyan factores de crecimiento económico".

Dejar atrás las políticas de recortes

"Los Presupuestos deben iniciar en 2019 un nuevo camino, dejando atrás las políticas de recortes que han conducido a nuestro país al empobrecimiento, la desigualdad, la precariedad del empleo, el desempleo estructural y la pérdida de poder de compra de los pensionistas. Hay que revertir el modelo basado en bajos costes salariales, con escasa inversión en tecnologías y formación, y en el que ha primado el trabajo precario y sin derechos", reclama UGT.

En materia de ingresos, UGT considera imprescindible "una reforma integral de la fiscalidad, que acometa con decisión y realismo la lucha contra el fraude, que logre una mayor suficiencia financiera a través de mayores ingresos (haciendo que paguen más los que más tienen) y eliminando la desigualdad en la carga tributaria; una propuesta que pasa por un IRPF más justo y con mayor capacidad recaudatoria. El fin último de la política impositiva debe ser la redistribución de la renta, la equidad económica y la cohesión social".

EL sindicato aboga porque en materia de gastos, se impulce "un modelo productivo más eficiente y sostenible, basado en la inversión en innovación y el avance tecnológico, que contemple las nuevas formas de producción, empleo y consumo (desde la digitalización y robotización, hasta la economía circular). Esto exige profundas y continúas transformaciones en ámbitos cruciales de la actividad económica y socio-laboral".

UGT defiende en su comunicado un sistema de pensiones que "afronte los retos del futuro sin perjudicar a las personas, unas políticas de empleo eficientes, que potencien y reformulen las políticas activas y que refuercen las prestaciones por desempleo para aumentar su grado de protección contributivo y asistencial"; además, "aprobar, en el marco del diálogo social, un verdadero plan de choque, con recursos excepcionales para impulsar la contratación laboral y el empleo de calidad, especialmente de los colectivos en peores condiciones".

El sindicato pide "un cambio en la concepción de las políticas fiscales, que apuesten por su papel como impulsores del crecimiento sostenible y el empleo de calidad y por su capacidad para reforzar el Estado de Bienestar".

Relajación del objetivo del déficit

Según el anuncio del Gobierno, se relaja el objetivo del déficit, que pasa del 1,3% sobre el PIB al 1,8%, se va a traducir en más margen para el conjunto de las Administraciones Públicas de cara al próximo año (alrededor de 6.000 millones).  El reparto será de una décima más para la Administración Central y dos para la Seguridad Social, mientras las Comunidades Autónomas contarán con dos décimas adicionales para su objetivo de déficit público, que pasará del 0,1% del PIB previsto, al 0,3%, lo que se traducirá en 2.400 millones.