El fraude que sufren los trabajadores a través de las horas extra vuelve a estar de actualidad después de que famoso cantante, C Tangana, haya denunciado que el también fue víctima de esta estafa empresarial cuando trabajaba para la cadena de bocadillos Pans&Company. El artista ha denunciado que le obligaban a hacer “horas complementarias” fue de su contrato y que no se las pagaban ni compensaban con vacaciones. “Me mangaron horas. Me deben por lo menos 600 euros de horas”, ha revelado.

La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha aprovechado la denuncia para recordar que existe un buzón para denunciar estas prácticas y ha animado a todos los perjudicados a no callarse. “Cuando te pase lo de Pucho recuerda que tienes a tu disposición el buzón de denuncias ante la Inspección de Trabajo”, ha señalado. No obstante, esta no es la única manera de que el trabajador reclame lo que le pertenece y ponga en conocimiento de las autoridades los delitos empresariales.

¿Qué hacer si no te pagan las horas extra?

Antes de comenzar con el procedimiento para denunciar el impago de las horas extraordinarias, es necesario conocer qué tiempo de trabajo se considera como tal. Según el propio Ministerio de Trabajo, “tendrán consideración de horas extraordinarias cada hora de trabajo que se realice sobre la duración máxima de la jornada ordinaria”. Además, cabe destacar que su realización es “voluntaria”, salvo pacto individual o colectivo, y se prohíbe su realización durante el periodo nocturno, salvo contados casos. En cualquier caso, deberán abonarse económicamente o ser compensadas por descanso.

Tan solo puede considerarse como “obligatorias” estas horas en caso de que “vengan exigidas por la necesidad de prevenir o reparar siniestros u otros daños extraordinarios y urgentes”, pero deben ser compensadas como “extraordinarias”. El máximo anual que se puede realizar es de 80 horas, límite que se supera o se oculta en muchas ocasiones y del que solo están excluidas las citadas “obligatorias”. No obstante, pese a la legislación clara y al control de la jornada a través de un registro obligatorio (fácilmente manipulable), en España no se han pagado en los últimos diez años el 48% de las horas extra realizadas, según los datos del INE.

Cuando un trabajador se encuentre en esta situación y compruebe que, efectivamente, está sufriendo una práctica empresarial ilegal, debe comprobar el registro de horas y, de ser posible, obtener una copia que puede utilizar como prueba. Correos electrónicos, llamadas telefónicas o mensajería vía aplicaciones también puede servir como prueba del desempeño de un trabajo fuera de jornada. Una vez recabadas las pruebas, debe exigirse a la empresa, vía escrita preferiblemente, el pago correspondiente a las horas adeudadas.

En este punto, la empresa puede reconocer la falta de pago y abonar lo correspondiente al trabajador, zanjando el conflicto. De no hacerlo, el empleado tiene que conocer que tiene varias vías para denunciar la práctica. Por un lado, puede acudir a la Inspección Provincial de Trabajo, donde deberá registrarse y dar parte, aunque posteriormente el funcionario que tramite la denuncia no informará a la empresa del nombre del denunciante.  Otra opción es utilizar el buzón contra el fraude laboral recomendado por la ministra de Trabajo, en el que se podrá denunciar vía internet y de forma anónima la situación.

Por último, es posible a través de los representantes sindicales. Si existe un sindicato en la empresa, es posible acudir a sus miembros legales para recibir asesoramiento legal. No obstante, pese a que puede no existir un sindicato en el centro de trabajo, cabe la posibilidad de acudir a uno del sector empresarial en el que nos desarrollamos o uno de los grandes del país para recibir apoyo.

2,4 millones de horas extra no pagadas

Tan solo entre julio y septiembre del pasado año, últimos datos disponibles de la Encuesta de Población Activa (EPA), se realizaron 5,8 millones de horas extra, de las cuales no se abonaron o compensaron con descanso 2,37 millones. En una perspectiva mayor, atendiendo a los últimos diez años, el 48% de estas horas no han sido pagadas, porcentaje que se eleva al 52% en el caso de las mujeres.

La hostelería es el sector donde menos se remuneran las horas extraordinarias, mientras que en algunos sectores de la industria son los que más las abonan. Por este motivo, UGT ha denunciado a España ante el Comité de Derechos Sociales de la Unión Europea por incumplir el artículo 4 de la Carta Social Europea, que recoge el derecho a una elevación de la remuneración por estas horas. Además, el propio Estatuto de los Trabajadores reza que “en ningún caso podrá ser inferior al valor de la hora ordinaria”.