El Consejo de Ministros que el Gobierno celebra este martes tiene dos objetivos principales: aprobar las tasas ‘Google’ y ‘Tobin’ y derogar el despido justificado por baja laboral. En el primer caso, el simple anuncio de su aprobación ha provocado un gran revuelo en la sociedad. Sin embargo, muchos no saben lo que suponen estas tasas ni cuál es el objetivo.

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En concreto, el Consejo de Ministros presentará un anteproyecto de ley para crear ambas tasas. Tras esto, deben remitirse al Gobierno para su trámite y la posterior puesta en marcha, por lo que su aplicación podría retrasarse hasta la segunda mitad del año. De hecho, la vicepresidenta económica Nadia Calviño anunció ayer que la ‘tasa Google’ no tendría efectos hasta diciembre, aplazando la liquidación hasta final de año.

A pesar de que la OCDE a nivel internacional alcanzó un acuerdo para gravar a las multinacionales tecnológicas hace apenas unas semanas, el Gobierno ha decidido poner en marcha la tasa de forma individual. De hecho, la medida lleva ya varios años en el punto de mira del Gobierno, que no ha sido capaz de llevarla a cabo por la inestabilidad política.

¿Por qué se llama ‘tasa Google’?

La ‘tasa Google’ está diseñada para gravar la actividad de las multinacionales tecnológicas en los países donde operan. Es decir, será un impuesto de obligado cumplimiento para las tecnológicas que superen los 750 millones de facturación mundial y los 3 millones en España, con un tipo impositivo del 3% para estas empresas.

La tasa no gravará la actividad como tal, sino la publicidad online, las plataformas que ponen en contacto a empresas con clientes o la venta y cesión de datos.

El impuesto es popularmente conocido como ‘tasa Google’ aunque realmente se trata de una tasa digital, que busca gravar a las grandes tecnológicas y no solo al gigante Google. De hecho, Nadia Calviño pidió ayer que no se le llame ‘tasa Google’ ya que su objetivo no es ir contra una empresa específica, sino establecer un impuesto que garantice que el valor añadido generado por las grandes multinacionales digitales se grave "donde se genera".

¿Cuánto espera recaudar el Gobierno?

Con la ‘tasa Google’ el Gobierno de España espera recaudar hasta 1.200 millones de euros, una cantidad que ayudará a reducir el déficit público del Estado, según las estimaciones del Gobierno hace un año.

Sin embargo, según fuentes gubernamentales a las que ha tenido acceso La Información, el nuevo Gobierno de coalición ha reestudiado las previsiones y espera recaudar entre 900 y 1.000 millones de euros al año, una rebaja de aproximadamente un 20% con respecto hace un año.

La cifra esperada por la Airef y el Banco de España es incluso menor. En el caso de la Airef, las previsiones se encuentran entre los 546 y 968 millones de euros, mientras que el Banco de España sitúa la recaudación prevista entre los 420 y 850 millones de euros.

¿A qué lo quiere destinar?

Tanto la recaudación de la ‘tasa Google’ como la ‘tasa Tobin’ irá destinada a sanear las cuentas del Estado y reducir el déficit público según las recomendaciones de la Unión Europea. Más concretamente, el objetivo de ambas tasas será tapar el agujero de la Seguridad Social.

Así, la cantidad que el Gobierno espera recaudar con ambas tasas irá destinado al pago de las pensiones, uno de los problemas más acuciantes del Gobierno actual, tanto por el déficit público como por el aumento constante del gasto en pensiones como consecuencia del envejecimiento de la población. 

¿Qué opinan los afectados?

Los principales afectados de la ‘tasa Google’ son precisamente las grandes multinacionales tecnológicas, muchas de ellas con sede en Estados Unidos. Por ese motivo, Donald Trump ha sido el primero en protestar por la tasa, concretamente con el anuncio de la aplicación del impuesto en Francia.

En el país vecino han optado por aplazar su liquidación hasta finales de año tras mantener conversaciones con Estados Unidos ya que Donald Trump amenazó con represalias al considerar que atacaba a sus multinacionales. Por su parte, el Gobierno español ha repetido la medida de Francia y ha aplazado la liquidación del impuesto hasta diciembre.