La máquina de recogida de residuos que se instaló durante los últimos Sanfermines, calificada de “éxito” por sus promotores ha recaído en que los resultados fueron amañados por los propios organizadores, en su mayoría vinculados a organizaciones no gubernamentales defensoras del medio ambiente. Esta iniciativa quedaba enmarcada en la campaña “Navarra por los retornables” y fue organizada por varias asociaciones medioambientales y el Ayuntamiento de Pamplona. El objetivo era impulsar la implantación del Sistema de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR) en la Comunidad Foral de Navarra en detrimento del sistema que opera actualmente en todo el territorio que separa la recogida de envases en el contenedor verde, amarillo y azul.

Los promotores de esta iniciativa instalaron en la zona de los fuegos artificiales de los últimos Sanfermines una máquina de dimensiones 8 x 6 metros para propiciar el retorno de envases. En el propio armazón de la recolectora, advertían claramente que cada persona podía llevar un máximo de 10 envases y por cada uno se recibirían 10 céntimos.

Cifras infladas

Las imágenes recogidas por las cámaras, delatan que los organizadores infringieron sus propias normas para inflar las cifras de recogida de envases. En uno de los vídeos publicados se puede ver a Eusebio Martínez de la Casa, presidente y fundados de la plataforma medioambiental Recircula y a Dani Gálvez, quien recoge los envases de la máquina, y César Sánchez, quien trae la bolsa de plástico. Estos dos últimos individuos pertenecen a una ONG medioambiental, Retorna, cuyo principal objetivo es defender el modelo de reciclaje SDDR.

Imágenes delatoras

En los vídeos publicados por Crónica Global, se aprecia cómo los integrantes de Retorna y Recircula sacan los envases de la máquina y los introducen en una bolsa reutilizable. Después se ve cómo reparten esos mismos envases a distintas personas para que vuelvan a introducirlos en la máquina. En otro de los vídeos se ve cómo una persona se acerca con un carro de compra y entrega alrededor de 40 envases al miembro de la ONG, Dani Gálvez, quien los introduce en una bolsa de plástico sin pasarlo por la máquina. Y a continuación, los organizadores pagan directamente a esa persona en cuestión, sin que sea la máquina.

Estas imágenes no solo demuestran el falseamiento de la prueba, sino que también deja en entredicho a los representantes de las ONG medioambientales por su inadecuada forma de proceder. A pesar de todo, los promotores de la iniciativa han calificado de “éxito” la experiencia y tildaron sus resultados de “impresionantes”, ya que recogieron 2.600 envases durante los dos días que funcionó este proyecto.

En la rueda de prensa para explicar los resultados de la iniciativa, Andoni Uriarte, de Recircula, señaló: “Todo el mundo ha participado, desde personas mayores hasta niños y niñas, y la pregunta más formulada ha sido cuándo se va a poner en funcionamiento el Sistema de Depósito y Retorno de Envases de manera definitiva’’.