Antonio Asenjo, exjefe de seguridad de Iberdrola tras ser despedido de la compañía el pasado jueves 12 de diciembre, ha denunciado al juzgado “maquinaciones” en su contra por el caso Villarejo y ratifica su “plena colaboración” con la Justicia.  En concreto, el exdirectivo ha remitido un escrito al Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional anticipando las claves de su próximo interrogatorio en el caso Tándem, que investiga los contratos que Iberdrola llevó a cabo con José Manuel Villarejo a través del Grupo Cenyt durante más de 13 años, tal y como publica hoy La Información.

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Es probable que Antonio Asenjo declare en la segunda quincena de enero ante el juez, ahora sin ninguna relación contractual con la compañía tras ser despedido el pasado jueves. Tras semanas de intensas negociaciones entre Ignacio Sánchez Galán, presidente de la compañía y el jefe de seguridad, este finalmente fue despedido por la pérdida de confianza, según las fuentes citadas por La Información.

Tal y como denuncia en el escrito, Asenjo salió de las oficinas de Iberdrola “sin saber que ya no volvería a ella debido a una indisposición que acabó con él en urgencias”, lo que derivó en una cirugía de corazón y la consecuente baja médica. Según el exjefe de seguridad, desde ese momento el acceso a la intranet y al correo electrónico quedaron cerrados para él. En esta línea, su defensa asegura que se enteró de su despido a través de los medios de comunicación.

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Ahora se encuentra recuperado y ha pedido expresamente declarar ante el juez cuanto antes para acabar con una situación que le ha convertido en "mero objeto de mercadeo por carroñeros de ajenas desgracias que emplean esta pieza separada para sus insidiosas maquinaciones".

En la misma línea, Asenjo ha solicitado al magistrado la acusación que presentó la Fiscalía Anticorrupción, así como los informes policiales en los que se apoya el Ministerio Público. Para ello alega que, por el hecho de ser una pieza secreta, no sabe de qué se le acusa realmente, sino que la única información que ha obtenido es a través de los medios de comunicación.

Además, el exdirectivo de Iberdrola ha pedido al Juzgado que no se le impongan medidas cautelares por no existir riesgo de fuga o de destrucción o alteración de pruebas.