La Unión Europea se ha abierto a adoptar medidas para frenar la crisis de los precios de la energía. En una reunión tensa y complicada, con diferentes propuestas y posturas para abordar la crisis energética, España y Portugal han logrado que el resto de socios comunitarios entiendan la particularidad de la península Ibérica como una “isla energética”.

Pedro Sánchez, que se levantó de la silla y salió de la sala, obligando a un parón técnico de treinta minutos, ha conseguido su objetivo. "Hemos hablado de energía, que es un tema difícil, que tiene un impacto a vida cuenta de la situación actual. Hemos trabajado con seriedad para demostrar nuestra unidad y determinación con los estados miembro", ha reconocido Charles Michel, presidente de la Comisión Europea, en rueda de prensa tras finalizar la reunión. Por su parte, Ursula von der Leyen ha explicado el compromiso de acelerar la inversión verde para dejar de depender de Rusia. "Defiendo una estrategia fuerte europea. El 75% del mercado de gas global se centra en Europa, tenemos un gran poder de compra, por eso vamos a utilizar nuestro poder para, en lugar de subir los precios, hacer uso de esa demanda que tenemos y aumentar nuestra capacidad de almacenamiento", ha explicado Von der Leyen.

Sobre la cuestión de desacoplar el precio del gas del de la electricidad, Von der Leyen ha detallado que sobre ello van a "presentar opciones en mayo". En relación a la posibilidad de que España y Portugal fijen sus propios topes, Michel ha reconocido que la península Ibérica tiene una situación muy especial, por lo que han acordado medidas especiales, mientras Von der Leyen ha insistido en que "la península ibérica tiene una situación especial, una alta carga de renovables y muy pocas interconexiones". "Por ello hemos acordado un tratamiento especial para que pueda gestionar los precios de la electricidad de la manera que hemos debatido en el Consejo", ha rematado.

Sánchez celebra el acuerdo

Pedro Sánchez, en rueda de prensa junto a Antonio Costa -primer ministro de Portugal-, ha querido dedicar sus primeras palabras a agradecer su apoyo al luso: "Quisiera agradecer el trabajo, el compromiso y la solidaridad de Antonio Costa, que hemos compartido muchas reflexiones y propuestas, y que finalmente han fructificado en un acuerdo muy importante para los ciudadanos de la península".

"El objetivo que nos habíamos marcado ha sido un objetivo que hemos cumplido en este consejo", ha remarcado Sánchez. "España y Portugal a partir de ahora podremos poner en marchar medidas excepcionales para reducir el precio de la electricidad. Se tendrán en cuenta las condiciones especiales de España y Portugal, como es el escaso nivel de interconexión con Europa, que es del menos 3%", ha añadido.

Además, ha explicado que ello no afecta al compromiso de transición energética ni supone un riesgo para los demás países europeos: "Se trata de una medida excepcional, temporal, que no supone subvencionar el gas, que no distorsiona los incentivos que nos hemos marcado desde Europa ni tampoco con los flujos de electricidad entre los países. No supone riesgo alguno para el cumplimiento de los objetivos de transición energética pero que nos va a permitir a ambos gobiernos bajar los precios".