La semana pasada, con la publicación del Índice de Precios de Consumo (IPC), que deberá confirmar el Instituto Nacional de Estadística (INE) el próximo 14 de diciembre, el porcentaje de subida de las pensiones se confirma en torno al 8,5%. El IPC promedio de 2022, calculado utilizando los datos comprendidos entre diciembre de 2021 y noviembre de este año, se sitúa exactamente en el 8,458%, cantidad que las pensiones verán incrementada a partir de 2023, independientemente de la cuantía previa. Este último apunte es importante, ya que, en países como Italia o Portugal la subida contemplada no será la misma para todos los tramos.

La elevada inflación media, al indexarse las pensiones a este valor, es una de las principales causas de que las pensiones suban más en España que en el resto de grandes economías de la eurozona. No obstante, actualmente España marca la inflación más baja de toda la zona euro, alejado de la senda inflacionista europea. La otra es la generalización de la subida, que incluye también a las rentas más altas. Dentro de las grandes economías, Francia es el único país que contempla una subida similar.

Concretamente, el Gobierno francés también ha aprobado una subida conforme a la inflación, pero, al ser su IPC medio anual más moderado (5,8%), el valor será menor. Además, el Ejecutivo de Macron ya ha realizado varias subidas a lo largo del año, que alcanzaron el 5,1% después de la última de julio. En consecuencia, los pensionistas franceses recibirán un incremento adicional del 0,8% en el primer mes de 2023 que se sumará a los casi 4.000 millones de euros de gasto previstos para prestaciones sociales.

El caso alemán es, quizá, el que más se diferencia del resto de países. Las pensiones del país bávaro se revalorizan con arreglo a la subida de los salarios y no al avance de la inflación. Además, la revalorización de estas prestaciones en Alemania se debate y realiza en el mes de julio, motivo por el que no se conocerá hasta ese momento la subida que decidirá el Gobierno de Scholz. No obstante, como reflejan varios medios del país, se calcula un incremento del 3,5% en Alemania oeste y de un 4,2% en la parte oriental, ambas subidas muy lejos de la inflación media con la que espera cerrar el curso del país, por encima del 8%. SI bien es cierto que, en julio, el Gobierno alemán aprobó una subida del 5,35% en occidente y del 6,2% en oriente.

Italia y Portugal diferencian por renta

Italia y Portugal también han aprobado una subida de las pensiones, pero, a diferencia de otras economías europeas, lo han hecho diferenciando en función de la cuantía. En el caso de Italia, el pasado mes fue aprobada una subida del 7,3%, equivalente a la inflación media del país, pero solo afectará al 100% a aquellas pensiones inferiores a los 2.100 euros. Desde esa cuantía hasta los 2.627 euros el porcentaje será del 90%, que se reducirá hasta el 75% para los pensionistas que perciben una prestación superior a los 2.627 euros. No obstante, el porcentaje del 7,3% puede ser superior si la inflación se dispara de aquí a final de año.

El caso del otro país mediterráneo es muy similar, a pesar de que en un comienzo se contemplaba una subida generalizada del 7,5%, en función de la inflación. Sin embargo, finalmente el ejecutivo luso otorgó una paga extra en octubre a los pensionistas por el valor de la mitad de su prestación y prepara subidas en tramos que oscilen entre el 3,9% y el 4,8%. Así, el Gobierno de Costa pretende garantizar el poder adquisitivo de los pensionistas, centrándose en aquellos cuya nómina es más baja.

El cálculo de las pensiones conocido el IPC promedio

Teniendo en cuenta que la pensión de jubilación media española se cifra en 1.257,9 euros al mes, según los últimos datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, y que la nueva subida que se prevé se cifraría en torno un 8,5%, el cálculo resulta sencillo. El 8,5% de los 1.257,9 euros de la pensión media, supone un incremento de 106,92 euros, alcanzando la pensión media por jubilación los 1.364,82 euros.

Continuando con las pensiones contributivas, la pensión por incapacidad permanente conlleva un 55% de la base reguladora y un 75% para personas desempleadas de más de 55 años. Atendiendo a que la base reguladora se calcula a partir de las bases de cotización, y, que la base de cotización media más baja se cifra en los 1.085 euros, la base reguladora mínima se coloca aproximadamente en los 1.000 euros.

De esta manera, la pensión por incapacidad permanente mínima se cifra en los 750 euros para los desempleados mayores de 55 años y en los 550 euros para el resto de los beneficiarios de esta pensión. Con el nuevo incremento, estos importes se incrementarán hasta alcanzar los 813,95 y los 596,75 euros respectivamente.

Con respecto a la pensión de viudedad, la pensión media en octubre alcanza los 780,6 euros al mes, de acuerdo con los datos de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Con la actualización prevista el aumento será de 66,35 euros, alcanzando la cuantía de 846,95 euros mensuales.