A raíz de la pandemia de coronavirus, el Gobierno ha aprobado una serie de medidas para paliar el impacto económico en las empresas españolas. Para ello ha puesto en marcha un instrumento destinado a proteger a empresas estratégicas a nivel nacional, a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI).

Tras aprobar el rescate a Air Europa, parece que otras empresas nacionales podrían estar en el ojo del SEPI, con un presupuesto total de 10.000 millones de euros. Una de ellas, según La Información, es Telefónica. Según el medio, el Gobierno está valorando la posibilidad de adquirir paulatinamente hasta un 5% de la operadora de telecomunicaciones.

ElPlural.com se ha puesto en contacto con Telefónica, que no hace comentarios al respecto, así como con los Ministerios de Economía y de Hacienda, sin obtener respuesta por el momento. 

Más allá de la labor del SEPI, los fondos europeos incluyen una importante dotación para la transición digital de los Estados miembros, en línea con la recuperación post Covid. Así, Telefónica podría convertirse en una compañía estratégica para la economía nacional, por ser una de las principales operadoras y su desarrollo de nuevas tecnologías como el 5G.

El Gobierno estaría planteando el refuerzo de este tipo de compañías, entre las que también se encuentra Indra, con un 18% del capital; Red Eléctrica (20%) o IAG (2,5%). Esto supondría que Telefónica tendría, por primera vez, capital público en su accionariado después de su privatización hace 20 años.

Respaldo a las compañías sistémicas

El objetivo del Ejecutivo, según La Información, es respaldar las compañías sistémicas que recibirán buena parte de los fondos europeos para tener un mayor control sobre ellas. Y es que, según las cifras conocidas por el momento, España recibirá más de 4.500 millones de euros de los fondos europeos para la expansión del 5G.

Además de avanzar en el control de la compañía también se reforzaría el capital de Telefónica. Actualmente, Telefónica cuenta con accionistas de referencia como CaixaBank (4,87%), BlackRock (4,98%) y BBVA (6,9%) y, en caso de formalizarse la entrada del Gobierno a través del SEPI, el Ejecutivo se superaría incluso a estos accionistas.

El Estado se desprendió de las acciones de Telefónica hace dos décadas, en 1999, en el proceso de privatización que culminó con el mandato popular de José María Aznar. A pesar de abandonar su participación en la operadora de telecomunicaciones, el Gobierno sí mantuvo su presencia en otras compañías como Indra.

No hay duda de que Telefónica tendrá un papel clave en la digitalización de la economía, tal y como ya han avanzado desde la compañía. De hecho, el presidente de la operadora, José María Álvarez-Pallete acudió a la presentación del plan de recuperación económica presentado por Pedro Sánchez y ha recalcado su intención de apoyar a la economía española en varias ocasiones.

"Pueden contar con el compromiso de Telefónica para el futuro digital de España. Telefónica es y será un actor fundamental en la reconstrucción. Y ponemos toda nuestra experiencia y todos nuestros recursos sobre la mesa para ayudar a levantar un mundo mejor", ha explicado Pallete en los últimos meses.