Novartis, la gran farmacéutica, busca deshacerse de su emblemática sede ubicada en la Gran Vía de les Corts Catalanes, Barcelona. La decisión de la compañía de influencia mundial viene motivada por una realidad cada vez más instaurada después de la pandemia: el teletrabajo. No obstante, la farmacéutica suiza seguirá siendo inquilina del reconocido edificio, pero tan solo ocupando una parte de este, según fuentes de la compañía han confirmado a ElPlural.com.

Por el momento, el principal pujante es el grupo empresarial Freo. La compañía alemana ha mostrado interés y el precio de la adquisición, gestionado por la inmobiliaria CBRE, podrá rondar los 40 millones de euros. De confirmarse la operación, el edificio construido en 1967 y que ha pertenecido a Novartis, Sandoz antes de la fusión con Ciba-Geigy, cambiará de manos tras más de 50 años.

El impulso del teletrabajo ha sido la principal causa que ha motivado la operación. De hecho, el grupo helvético ha sido un gran impulsor de esta movilidad de trabajo, incluso antes de la llegada de la Covid-19, con su programa Choice with responsability de trabajo a distancia. Esta modalidad ofrecida por la empresa facilita a los trabajadores un modelo más flexible en el que la elección, sea el teletrabajo, el trabajo presencial o la modalidad mixta, depende enteramente del trabajador, bajo su propia responsabilidad, como refleja el nombre elegido para el programa.

En consecuencia, este conjunto de políticas, ya desarrolladas por la empresa previamente e impulsadas por la crisis sanitaria, ha propiciado que el laboratorio farmacéutico abandone su edificio de la ciudad condal, aunque no por completo, ya que, seguirá ocupando una parte todavía por determinar. De esta manera, sigue la senda marcada por otras empresas como Liberty, que el pasado año se deshizo de la mitad de su sede de Madrid por 35 millones de euros.

Casi 300 afectados por un ERE

Coincide esto, por lo menos en fechas, con el anuncio de Novartis de un expediente de regulación de empleo (ERE) de entre 220 y 240 personas en España. Este expediente “repercutirá en las distintas áreas de la compañía”, como comunicó la propia empresa, pero aún no se conocen las personas afectadas. La empresa, por su parte, ha justificado los despidos por "el proceso de transformación con una estructura más ágil".

Hasta el momento, Novartis ha explicado que es "consciente del impacto de esta reorganización en sus empleados" y que su voluntad es mantener un diálogo con los sindicatos, que se iniciará próximamente. Las negociaciones tendrán una duración de 30 días y el momento exacto de aplicación de los despidos se deberán decidir durante estos encuentros.