Indra ha modernizado los principales centros de control aéreos de España y los prepara para liderar la construcción del cielo digital europeo, que convertirá el espacio aéreo de los 27 países miembro en el más seguro, eficiente y respetuoso con el medioambiente del mundo. Los cinco centros de control que gestionan los vuelos en ruta en España -Madrid, Barcelona, Canarias, Sevilla y Palma de Mallorca- y los que controlan la aproximación a los grandes aeropuertos de Málaga y Valencia operan ya con el sistema de gestión de tráfico aéreo SACTA-iTEC 4.0.

Esta nueva versión del sistema SACTA incorpora funcionalidades avanzadas que permitirán a ENAIRE gestionar más vuelos, manteniendo los máximos niveles de seguridad y puntualidad, según asegura la compañía en un comunicado, e incorpora, por primera vez, algunas de las funcionalidades clave del sistema de gestión de tráfico aéreo iTEC, que Indra ha desplegado en algunos de los centros de control aéreos más importantes del continente.

Se trata de un sistema de siguiente generación, con el que Indra prepara a España para adaptarse a la nueva arquitectura del espacio aéreo que la Unión Europea está impulsando y que transformará completamente el sector. El sistema incorpora las tecnologías digitales de vanguardia para ofrecer una precisión sin precedentes en la gestión de los vuelos.

La modernización de esta infraestructura permite volar de forma más rentable y evita emisiones innecesarias. Así, aporta una solución tangible y real al problema medioambiental mientras se avanza en el desarrollo de nuevos combustibles limpios para la aviación. La nueva versión del SACTA aumenta el número de sectores en los que se puede dividir el control del cielo español, dotando a la red de control aéreo de flexibilidad para adaptarse a cualquier cambio brusco en la demanda sin congestionar el tráfico y los aeropuertos.

Mejoras del tráfico aéreo

Las pantallas de las posiciones de controlador presentan de forma mejorada los datos de posición, velocidad, rumbo y virajes de las aeronaves, facilitando una gestión más eficiente. Además, para reforzar la seguridad, el sistema alerta en caso de que la autorización para cambiar de nivel que da el controlador difiera de la seleccionada por el piloto. También incorpora la nueva categorización (RECAT-EU), que mejora el cálculo y reduce la separación que las aeronaves deben mantener para evitar las turbulencias generadas por otros aviones, elevando la capacidad y eficiencia.

En la fase de aproximación al aeropuerto, el controlador visualiza la información de separación con mayor detalle. Además de tener en cuenta la distancia para evitar turbulencias, el sistema vigila la separación que deben respetar las aeronaves en función del tiempo de refresco de la información radar y del orden establecido por el gestor de llegadas a pista (AMAN).

Con esto se gana capacidad y se evita tener que dejar a aeronaves en espera en el aire consumiendo combustible de forma innecesaria El sistema lanza además una alerta en caso de incumplimiento de algún parámetro. Los controladores también podrán realizar cambios de configuración de pistas no programados, mediante la modificación de la ruta de aeronaves en aproximación, lo que aporta una mayor capacidad para responder a cualquier imprevisto y asegura la máxima fluidez del tráfico.

La implantación de esta nueva versión del SACTA-iTEC 4.0 se enmarca dentro de la Alianza iTEC de la que la que ENAIRE es socio fundador y que tiene a Indra como socio tecnológico. Esta alianza está integrada además por los proveedores de servicios de navegación de Alemania (DFS), Reino Unido (NATS), Holanda (LVNL), Lituania (Oro Navigacija), Noruega (AVINOR) y Polonia (PANSA). Juntos han desarrollado el sistema de gestión de tráfico aéreo iTEC, que actualmente siguen evolucionando.

El objetivo es asegurar que el tráfico aéreo en Europa sea cada vez más fluido, eficiente y limpio, garantizando una perfecta interoperabilidad entre los centros de control de todo el continente. Una vez completado el despliegue, el sistema iTEC gestionará más de siete millones de vuelos al año en Europa, así como algunos de los espacios aéreos más complejos y con más tráfico del mundo. En este momento, ya está operativo en el centro de control alemán de Karlsruhe, el de Prestwick en Escocia y el de Vilna en Lituania, con ENAIRE avanzando en su completa implantación.