El Gobierno ha actualizado el borrador del Plan Nacional Integrado de Energía (PNIEC) 2023-2030, un documento provisional que debe remitir a Bruselas antes del 30 de junio para su evaluación. El objetivo es que el plan esté finalizado en junio de 2024 tal y como determina la Unión Europea, que obliga a los países miembros a tomar medidas que garanticen el cumplimiento de los objetivos climáticos para 2030. La propuesta incluye, entre otras cosas, los objetivos de nuestro país para la reducción de emisiones, el uso de energías renovables y medidas de eficiencia energética.

España remitió a Bruselas la primera versión del PNIEC en 2020, pero el contexto ha cambiado considerablemente desde entonces, debido a la pandemia y la crisis energética, que han obligado a introducir revisiones de objetivos en renovables, ante la aceleración de la urgencia en la descarbonización.

La ministra portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha defendido que esta hoja de ruta energética forma parte de la transformación económica de España y va a ser un importante activador de inversiones. Además, añadió que también tiene una traslación “en el contexto social y de mejora de la vida de las familias”. “De una inmensa mayoría de españoles y españolas, en forma de renovación de sus viviendas, de apuesta por el autoconsumo, de nuevas oportunidades de empleo o de refuerzo de la nueva formación profesional”, dijo.

Cepsa reclama potenciar la movilidad eléctrica

El documento es fruto de largos meses de trabajo y reuniones con todos los actores del sector energético. A la espera de la publicación del texto con las cifras y los nuevos objetivos, empresas como Cepsa, por ejemplo, destacan que, en algunos aspectos, los objetivos marcados en el primer borrador ya se están cumpliendo. Es el caso por ejemplo de las energías de origen renovable, que en este año supondrán el 50% de la electricidad generada, según datos de Red Eléctrica; el desarrollo del hidrógeno renovable, el fomento del autoconsumo. Sin embargo, cree que nuestra asignatura pendiente es la movilidad eléctrica y reclama medidas al respecto.

“Las ventas, aunque crecen, lo hacen a un ritmo insuficiente para cumplir el objetivo de 5 millones de vehículos. También es reducido el despliegue de puntos de recarga ultra rápida, con menos de 200 puntos de este tipo en toda España, frente a unas 12.000 gasolineras”, resume en un documento sobre el PNIEC. Por otro lado, señala que tampoco se están cumpliendo los objetivos de despliegue de bombas de calor para la electrificación de la calefacción a nivel residencial.

La compañía subraya la necesidad de independencia energética y la seguridad del suministro. “España puede liderar la transición energética en Europa, convertirse en exportador de energía y favorecer la reindustrialización”, señala. En este sentido, su estrategia para 2030 queda recogida en ‘Positive Motion’, un plan en línea con el PNIEC, que permitirán reducir sus emisiones de en 2030 un 55% con respecto a 2019, y también la huella de carbono de su energía vendida en un 15-20%, según datos facilitados por Cepsa.

Positive Motion recoge tres palancas principales para la descarbonización: hidrógeno renovable, biocombustibles y movilidad eléctrica. Entre los objetivos que plantea para 2030 está contar con un punto ultra rápido de recarga cada 200 km. En los principales corredores interurbanos, la producción de 2,5 millones de toneladas de biocombustible y el despliegue de infraestructuras de recarga de hidrógeno con una estación de Cepsa cada 300 kilómetros.

Un texto más ambicioso que el de 2020

Aunque para conocer los detalles en profundidad habrá que esperar a este miércoles, la secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen, ha avanzado durante la reunión anual de la patronal gasista Sedigas que el nuevo texto es más ambicioso que el original. Además, ha asegurado Aagesen, en su redacción se han considerado aspectos como las hojas de ruta tanto del biogás como del hidrógeno, cuyas expectativas "se han superado"

Por su parte, la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha recalcado que el PNIEC se ha adaptado "para reflejar que España ha hecho los deberes". De hecho, ha añadido, las inversiones desplegadas y las medidas adoptadas están encauzando la transición energética y van a permitir cumplir "con creces" los objetivos fijados por la Unión Europea.