Endesa ha cerrado el primer trimestre con un beneficio ordinario neto de 594 millones de euros, un 76% más que en el mismo periodo del año anterior, a pesar del impacto del pago del impuesto extraordinario y temporal sobre sus cuentas trimestrales, tal y como ha presentado este martes la eléctrica ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La compañía justifica la mejora de su beneficio ordinario por la "progresiva normalización de las condiciones del mercado energético" derivada de la bajada de los precios del gas en los primeros meses del año frente al encarecimiento de los precios energéticos del mismo periodo de 2022, marcado por el estallido de la guerra de Ucrania. 

La eléctrica, filial de la italiana Enel, ha desembolsado un total de 208 millones de euros por el pago del gravamen extraordinario del Gobierno, diseñado para frenar los beneficios caídos del cielo en el sector energético, y que la compañía ya ha recurrido ante los tribunales. En concreto, el impuesto sobre el sector energético grava el correspondiente al 1,2% de los ingresos de estas compañías. A nivel trimestral, los ingresos de la eléctrica han cerrado el mes de marzo en los 7.504 millones de euros, precisamente un 1,2% menos que los obtenidos en el primer trimestre de 2022.

Por otro lado, el resultado bruto de explotación (ebitda) de Endesa mejora un 60% en el primer trimestre, hasta los 1.462 millones de euros, un aumento que la eléctrica explica por la buena evolución del negocio de generación convencional y renovable y por la normalización de la actividad de comercialización.

Endesa pierde en bolsa tras presentar resultados

No obstante, los inversores han recibido los resultados económicos trimestrales de Endesa con caídas de la acción desde el arranque de la sesión bursátil del Ibex 35. Las acciones de Endesa caen un 0,22% en los primeros momentos de la jornada bursátil hasta los 20,24 euros, alcanzando sus mínimos semanales, a pesar de haber reforzado su beneficio en un 76% en los primeros meses del año. 

“Hemos iniciado un ejercicio 2023 aprovechando todas las oportunidades que un modelo de negocio de empresa verticalmente integrada, junto a una gestión acertada de múltiples variables, nos permite. A pesar de estos sólidos resultados, pronosticamos una normalización de las condiciones de nuestros negocios de generación convencional y de gas a lo largo del año, por lo que no hay que bajar la guardia durante los próximos meses", ha celebrado el consejero delegado de Endesa, José Bogas.

En materia puramente energética, Endesa destaca en sus cuentas trimestrales un aumento de la producción renovable del 32% frente al primer trimestre del ejercicio anterior. Un avance en transición energética que, sumado a la generación de energía nuclear de la eléctrica en los primeros meses del año, eleva al 83% el volumen de electricidad disponible producido sin emisiones de gases de efecto invernadero en la Península Ibérica, según las cifras de las que presume este martes la compañía.  

Endesa celebra el aumento de capacidad renovable en el último año, con 900 nuevos megavatios limpios para cerrar el año en 9.300 megavatios disponibles, un 10% más que en el ejercicio anterior. Asimismo, la compañía incluye entre sus planes de futuro más próximos que la totalidad de los 1.100 megavatios solares y eólicos en ejecución queden conectados ya este 2023. Estrechamente relacionado con la transición y el impulso a las energías renovables, la red de puntos de recarga para vehículos eléctricos de Endesa suma ya 15.350 al cierre de marzo, un 51% más en términos interanuales.

Mejora de las ventas y de la cifra de clientes

En materia de clientes, la filial de la italiana Enel asegura haber mantenido una "buena evolución comercial", con una ganancia de alrededor de 480.000 clientes eléctricos en el mercado libre frente al cierre de marzo de 2022, alcanzando los 6,8 millones. Gracias al aumendo de clientes, las ventas de Endesa en el segmento doméstico han crecido un 13% hasta los 6,2 teravatios-hora (TWh). Además, la compañía relaciona en sus cuentas que el aumento de la producción renovable en el primer trimestre del año es la que ha permitido cubrir el 77% de las ventas a precio fijo a clientes, 14 TWh en el trimestre, con electricidad libre de emisiones.

La inversión de Endesa en el primer trimestre ha aumentado un 2% hasta los 409 millones de euros y asegura ahora que ya tiene vendida el 100% de su producción energética para este 2023, es decir, todos los megavatios generados a través de energía hidroeléctrica, nuclear y renovable. Asimismo, avanza que también el 87% de la energía prevista para 2024 está ya vendida, a un precio de 65 euros por megavatio-hora, cumpliendo la normativa en vigor.

Por otro lado, las cifras trimestrales de Endesa reflejan una gestión de la cartera de contratos de gas que impulsa el margen unitario de este negocio hasta los 6 euros MWh mientras que la cartera de clientes de este sector crece hasta 1,8 millones, un 6% más que en el cierre de marzo de 2022. La compañía celebra también una senda de estabilidad en el negocio de distribución, con una reducción del tiempo de interrupción medio del 12% interanual, hasta 12,9 minutos. 

Con estos resultados trimestrales, la energética reafirma sus objetivos para el conjunto de este 2023, que aspiran a un EBITDA anual en la horquilla de entre 4.400 y 4.700 millones de euros y a un beneficio neto ordinario de entre 1.400 y 1.500 millones de euros. "Nuestras previsiones para el conjunto de 2023 están confirmadas", ha celebrado el consejero delegado de la eléctrica. 

En lado más negativo de la cuenta de resultados al cierre de marzo, Endesa reconoce obsrevar una leve alza de las pérdidas provocadas por los enganches ilegales a la red eléctrica, uno de los aspectos más criticados por la compañía desde hace años y que, en ocasiones, ha llegado a generar incluso problemas de reputación.