Endesa ha obtenido un beneficio neto de 844 millones de euros en el primer trimestre del año, lo que supone un aumento del 132,5% frente al mismo periodo del ejercicio anterior, impulsado por la buena marcha del negocio liberalizado y extraordinarios, tal y como ha informado la compañía.
Los resultados trimestrales recogen el impacto de la entrada en vigor del nuevo convenio colectivo y el registro de determinadas provisiones por reestructuración de plantilla, que han generado un impacto positivo de 267 millones de euros en el resultado neto. Excluyendo estos efectos extraordinarios, el beneficio neto de la energética entre los meses de enero y marzo registró un aumento del 59%.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) de la compañía a cierre de marzo se situó en los 1.476 millones de euros, con un crecimiento del 59% frente a hace un año.
Esto es consecuencia del impacto de la aplicación de las nuevas medidas contempladas en el convenio colectivo aprobado el pasado mes de enero, que ha supuesto un retorno de una provisión de 515 millones de euros. Por otro lado, el grupo ha realizado una provisión de 159 millones de euros para planes de reestructuración de plantilla. El impacto de estos dos aspectos ha sido de 356 millones de euros.
Descontando los efectos extraordinarios, el Ebitda creció un 21% por la buena evolución del negocio liberalizado y por la estabilidad del negocio regulado. Los ingresos de la eléctrica en el periodo de enero a marzo alcanzaron los 5.069 millones de euros, un 0,3% menos a los obtenidos en el primer trimestre de 2019.
La demanda peninsular ha caído un 3,2% en el primer trimestre
El consejero delegado de Endesa, José Bogas, ha destacado que los "buenos resultados" del primer trimestre van a servir al grupo "para afrontar con garantías el impacto del Covid-19 durante el segundo trimestre".
Sin embargo, la compañía reconoce que la demanda peninsular de energía eléctrica de España ha caído un 3,2% en este primer trimestre, descenso que se sitúa en un 2,8% si se corrigen los efectos de laboralidad y temperatura.
"La compañía ya ha puesto en marcha de nuevo todos los trabajos de construcción de parques renovables, y estamos plenamente comprometidos con las inversiones previstas en nuestro plan estratégico. Estamos estudiando, incluso, la posibilidad de acelerar este plan, especialmente en plantas eólicas y solares, para poder ayudar a la reactivación de la economía con la creación de empleo y la generación de riqueza", añadió.
En cuanto al dividendo, el Consejo de Administración presentará una propuesta en la Junta de Accionistas de este martes para la distribución de un dividendo total por un importe bruto de 1,475 euros por acción, lo que supone un total de 1.562 millones de euros. Así, la propuesta de dividendo supone un incremento del 3,4% sobre el dividendo con cargo a los resultados de 2018.