BBVA cerrará este domingo otras 110 oficinas, completando así su plan de 'redimensión' de la red en España, que pretende echar el cierre a un total de 480 oficinas bancarias. En definitiva el banco está ejecutando un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) pactado el pasado mes de junio. Este 'ajuste' supone la salida de 2.935 empleados (2.177 de la red de oficinas y 758 de servicios centrales y estructuras intermedias). El mayor número de empleados despedidos que ya abandonaron las instalaciones de la entidad procedían de los servicios centrales, estructuras intermedias y centro corporativo. Los trabajadores de la red de oficinas están siendo despedidos progresivamente

BBVA ha clausurado ya un total de 172 oficinas en julio, 90 en septiembre y 108 en octubre lo que significa la extinción de 2.400 contratos de trabajadores acogidos al ERE. Aún hay más de 500 empleados que han de desvincularse del banco. 

No obstante, BBVA tiene previsto finiquitar los contratos del resto de la plantilla el próximo mes de noviembre, teniendo en cuenta que este domingo clausurará 110 sucursales. Los pocos trabajadores que permanezcan en los servicios centrales y estructuras intermedias lo harán por causas organizativas aunque deberán salir en el ERE del 31 de marzo de 2022. Es decir, BBVA se queda en los huesos, en una estructura ínfima en la que la relación empleado-cliente queda extinguida. 

¿Habrá reincorporaciones?

Los trabajadores de BBVA afectados por el despido colectivo pueden incorporarse al plan de recolocación externa concertado con Randstad Outplacement, un programa de un año de duración, ampliable hasta dos años y medio, para recolocar con contratos indefinidos o mediante autoempleo a todos los que quieran seguir trabajando. Todo un detalle. 

EL del BBVA se trata del primer ERE que realiza el banco en España. Onur Genç, consejero delegado de BBVA, ha afirmado que hasta el 2024 la entidad no tiene previsto realizar otro ERE en España -menudo alivio, dos años de margen- sin embargo, la entidad ha aumentado la remuneración de sus accionistas. En definitiva el banco seguirá trabajando para reducir los gastos del centro corporativo. De hecho, la apuesta del BBVA se dirige hacia los canales digitales