La emergencia sanitaria ha puesto de manifiesto en los últimos meses la importancia de la España rural, que ha vivido un pequeño resurgir a raíz de los confinamientos provocados por la pandemia de la Covid-19 y el teletrabajo. Pero a pesar de ello, las pequeñas poblaciones continúan reflejando la tendencia al abandono iniciada hace muchos años por el éxodo generalizado hacia las grandes ciudades. Según un reciente informe de Afi sobre la inclusión financiera en España, en las dos últimas décadas, la población de los municipios pequeños (1.000 habitantes o menos) ha caído un 8,9% (142.000 habitantes menos).
Banco Santander, consciente de las carencias de los habitantes en estas localidades más despobladas, ha sellado una serie de alianzas con el objetivo de atender las necesidades financieras de los pueblos. El esfuerzo se ha centrado en desarrollar canales alternativos de atención para llegar a todas las capas de la población, además de promover la digitalización de los clientes y acompañarlos en este proceso.
El grupo que preside Ana Botín ha llegado a un acuerdo con Correos, que desde el primer trimestre de 2021 permite a la entidad ofrecer servicios financieros básicos en los 4.675 puntos de atención con los que cuenta la compañía postal (2.393 oficinas y 2.282 puntos de atención rural). Esto supone que el grupo lleva sus servicios financieros básicos a 1.500 municipios más.
Con esta alianza, los clientes de Santander pueden retirar dinero en efectivo en las oficinas de Correos, y los carteros entregar dinero en cualquier domicilio de España. En el 75% de los municipios con menos de 1.000 habitantes donde el banco no está presente existe un punto de atención de Correos, lo que permite a Santander llegar al 66% de la población que hasta ahora no disponía de un servicio de efectivo en su municipio.
Además, el 54% de los clientes de Santander que viven en plazas donde hasta ahora el banco no tenía presencia son digitales y gracias a este acuerdo podrán disponer de servicios financieros básicos y complementarios a la banca digital. La entidad cuenta ya en España con 5,1 millones de clientes digitales que se conectan más de 22 veces al mes a la app y web del banco, lo que supone que el 65% de sus clientes activos son clientes digitales. De hecho, desde que se decretó el estado de alarma, los canales digitales han sido claves para garantizar la normal operativa del banco.
Ana Botín, presidenta de Banco Santander
A los más de 4.600 puntos de atención de Correos se le suma la red de 3.000 oficinas de Mapfre, compañía con la que Banco Santander amplió el pasado mes de abril su acuerdo comercial con el propósito de aprovechar la capilaridad, llegar a más clientes y ampliar su ámbito de actuación. Así, cada punto de venta de la aseguradora tiene asignada una oficina tutora de Banco Santander, que cuenta con el apoyo de los equipos de gestión remota de ventas digitales y, de manera adicional, la red de Mapfre cuenta con el soporte de responsables comerciales del banco en su mismo territorio. Entre los productos y servicios que la aseguradora puede ofrecer a sus clientes particulares figuran las cuentas corrientes, las tarjetas de crédito, las hipotecas, los créditos al consumo y la domiciliación de ingresos y de recibos. En el caso de las empresas, el abanico abarca desde cuentas, créditos y préstamos, hasta los TPV, avales o leasing, pasando por productos y servicios más específicos, como aquellos que tienen que ver con el negocio internacional o el descuento comercial.
‘Cajas fuertes’ virtuales para los pequeños negocios rurales
Otra de las alianzas del banco en apoyo a las zonas rurales es la alcanzada con Prosegur: Cash Today, que nace para dar solución a los problemas de efectivo en negocios pequeños. Se trata del primer servicio digital de custodia y gestión de efectivo para los negocios. Funciona como una caja fuerte inteligente que facilita el abono inmediato en cuenta del efectivo recaudado en los negocios con todas las garantías, tanto por la seguridad de la propia máquina como por el aseguramiento del efectivo ingresado que incorpora el contrato. Es una buena solución para la gestión y custodia de efectivo de negocios ubicados en pueblos que no tengan oficinas bancarias.
Entre las principales ventajas del servicio se encuentra el abono inmediato del efectivo ingresado y validado por el dispositivo en la cuenta Santander del cliente, del mismo modo que sucede con los cobros por tarjeta. Además, a través de una plataforma online, el usuario visualiza en tiempo real todos los movimientos realizados en su dispositivo Cash Today, lo que otorga total trazabilidad y control sobre las operaciones. Prosegur Cash se responsabiliza de recoger el efectivo almacenado y entregar el cambio, si fuera necesario. La compañía también pone a disposición de los clientes un servicio exclusivo para la atención y resolución de incidencias y consultas.
Las mejoras que supone la automatización de los procesos asociados a la gestión del efectivo son muchas, tanto para grandes como para pequeños negocios. Especialmente, aquellos relacionados con la reducción del riesgo y el ahorro de tiempo. Entre las grandes economías de la zona euro, España es el país en el que más se usa el efectivo para las pequeñas compras. La implantación de Cash Today se dirigirá principalmente a sectores como los de la distribución alimentaria, logística, restauración, pequeño y gran distribución, estaciones de servicio, farmacias o estancos entre otros.
A estas herramientas que pone el banco, a través de acuerdos varios, para dar servicio a las España rural hay que añadir Santander Personal. Este proyecto consiste en una red de 1.150 gestores digitales que ofrecen un servicio de atención en remoto a 1,6 millones de clientes (particulares, select, autónomos, microempresas y pymes) con las mismas capacidades y calidad que en una oficina. Se puede contactar por teléfono, correo electrónico, hacer videollamada o chatear con él y contratar a través de la web o de la app del banco.