Este martes 1 de junio entra en vigor la nueva factura de la luz, con grandes cambios para los consumidores. Algunos podrán disfrutar del cambio con una bajada de su factura y, en el lado contrario, otros sufrirán un aumento del coste en su factura de la luz. Todo depende de la potencia contratada a día de hoy.
En el caso positivo se encuentran los consumidores acogidos a la tarifa regulada PVPC, es decir, Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor. Esta es la modalidad eléctrica más económica para los españoles, entre los que se encuentra un alto porcentaje de personas jubiladas. Precisamente estos serán los que más se beneficien del cambio en el modelo de factura a partir de este martes, también por el menor consumo eléctrico y la menor potencia contratada.
Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el cambio podrá beneficiar o perjudicar al consumidor con arreglo a la potencia que tenga contratada a día de hoy, antes de la entrada en vigor de la nueva factura. Así, ejemplifica que para un consumidor medio con tarifa 2.0A, con 4,6KW de potencia contratada y un gasto de 3.500KWh al año, la factura se abaratará en 21 euros anuales de media, menos de 2 euros al mes.
Si ese mismo hogar tiene contratada la tarifa con discriminación horaria 2.0A DH pagará alrededor de 34 euros más al año, es decir, 3 euros más al mes. Esto sucede porque dicho consumidor pierde la ventaja con la que cuenta según el sistema actual.
Los más beneficiados: menos de 15kW contratados
Con esto, la OCU explica que los mayores beneficiados por el nuevo modelo de tarifa eléctrica serán los hogares y las empresas con una potencia contratada de entre 10 y 15KW. En otras palabras, la nueva factura ayudará a ahorrar a aquellos consumidores que hacen un menor uso de la electricidad y, por tanto, tienen un menor gasto.
La reducción en los peajes y los cargos, el popularmente llamado “mínimo”, permitirá principalmente a los hogares con menor uso de la luz aumentar su ahorro en la factura. Lo que realmente supone el cambio en la factura es la bajada de precio en las tarifas de peajes y cargos, uno de los componentes que determinan el precio de la electricidad, que dependen en último término de la comercializadora y la tarifa contratada.
El consumidor no debe realizar ningún cambio ante la entrada en vigor de esta nueva factura eléctrica, sino que se realiza automáticamente. Para aquellos con la tarifa regulada PVPC y una potencia contratada igual o menor de 15 KWh, el cambio será adoptado automáticamente con respecto a los nuevos tramos horarios.
En cifras, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) estima que alrededor de 19 millones de consumidores se beneficiarán de esta nueva medida, ya que actualmente no cuentan con discriminación horaria, mientras que la factura por peajes y cargos se encarecerá para los 10 millones de consumidores que ya disfrutaban de esta discriminación y contaban con un precio más barato de electricidad.
Con este nuevo modelo está previsto que ahorre más quien mejor se adapte a los nuevos tramos horarios. Es decir, quien opte por poner la lavadora o cualquier otro electrodoméstico en las horas valle -durante la noche o los fines de semana y festivos- antes que hacerlo en las horas punta disfrutará de un mayor ahorro en su factura de la luz.
