Un análisis de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) revela que existen hasta una docena de tarjetas sin comisiones, incluyendo por mantenimiento o por retirada de efectivo en un cajero distinto al de la entidad emisora. No obstante, sí existe un máximo de retiradas o de importe. Este tipo de tarjetas tampoco aplican comisiones por cambio de divisa en compras o extracciones en cajeros fuera de la zona euro. Es decir, no cobran comisiones por sacar dinero en cualquier cajero del mundo habiendo un número de extracciones gratuitas - de 2 a 4 al mes- o una cantidad inferior a 200 euros.

Una gran diferencia si tenemos en cuenta que las tarjetas tradicionales cobran hasta el 3% del importe de la operación, a lo que habría que sumar lo establecido por extraer dinero en cajeros. A este respecto la OCU señala que “el único coste adicional” sería el cobro del envío de la tarjeta, algo que tan “solo lo aplican cinco bancos y, en ningún caso, supera los siete euros".

Según la organización, diez de estas tarjetas están expedidas por bancos nuevos, algunos extranjeros, a través de sus cuentas estándar, como BNC 10, BNext, Cuenta N26, Monese, MyInvestor, Rebellion Pay, Revolut, Verse, Vivid y Wise. Concretamente, BNC 10, BNext, Monese, Rebellion Pay y Revolut permiten recargas instantáneas desde otra tarjeta. Las otras dos entidades que destaca, en cambio, son de bancos tradicionales y requieren domiciliar una nómina: Deutsche Bank y Pibank.

La utilidad de las tarjetas sin comisiones 

Este tipo de tarjetas pueden ser extremadamente útiles en el extranjero o para realizar compras ‘online'. En este último caso, ofrecen un “plus de seguridad” ya que el posible fraude se limita al saldo precargado. La OCU considera que estos plásticos son “una alternativa muy interesante” como segunda tarjeta para evitar el pago de comisiones, o como primera tarjeta “siempre y cuando las condiciones de la cuenta asociada sean interesantes y el usuario se maneje bien por internet”, ya que la mayoría de ellas cuentan con pocas o ninguna sede física a la que dirigirse. La organización también hace hincapié en comprobar las condiciones de la cuenta que tenga contratada a fin de evitar pagar "excesivos cargos”.

Según una encuesta realizada en 2020 por el Banco Central Europeo, el 40% de los encuestados indicó que desde el comienzo de la pandemia usaba menos el dinero en efectivo, y una aplastante mayoría declaraba que seguiría actuando así. Una razón justificada para elegir qué tipo de tarjeta nos conviene.