La economía española continúa registrando datos positivos y espera cerrar el año por encima de todas las previsiones realizadas a lo largo del año. Así lo considera la Comisión Europea, que se ha sumado a una larga de organismos que se han visto obligados a elevar la progresión con la que el Producto Interior Bruto (PIB) español cerrará 2024. Bruselas ha mejorado en tres décimas la cifra y se lleva la progresión hasta el 3%, situando a España como la gran economía de la Unión Europea (UE) que más crece.

Mientras el Partido Popular (PP) lleva su política irresponsable a las instituciones comunitarias, la Comisión Europea reconoce los buenos datos económicos de España”, ha destacado la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, refiriéndose al chantaje realizado por los de Alberto Núñez Feijóo en relación con Teresa Ribera y el Ejecutivo de Úrsula von der Leyen. “Bruselas eleva hasta el 3% su previsión de PIB y confirma que España será la gran economía europea que más crecerá”, ha zanjado la también vicepresidenta, contenta por la modificación al alza.

El dato español tan solo se sitúa por detrás de Chipre, Croacia y Malta y supera holgadamente la media de la zona euro, que se ubica en el 0,8%, y del conjunto de los Veintisiete, que marcan un 0,9%. No obstante, en estos datos no se refleja todavía la influencia económica de la DANA y las políticas de gasto para responder a sus efectos, que podrían derivar en un incumplimiento de los objetivos de déficit que el Gobierno español está dispuesto a asumir y que Bruselas ha asegurado entender.

Los efectos económicos del temporal que ha asolado decenas de municipios, la mayoría en Valencia, no solo tendrá efectos en la economía doméstica de miles de personas; sino que afectarán a la economía nacional y, a su vez, al entorno europeo más cercano a España. "Los daños en las infraestructuras de las regiones afectadas pueden tener repercusiones más amplias en el tejido productivo más allá de sus fronteras, mientras que las perturbaciones de la actividad económica podrían reavivar las presiones inflacionistas, en particular sobre los alimentos", explica la Comisión Europea.

El déficit y la deuda seguirán reduciéndose

Más allá del crecimiento, el Ejecutivo europeo también ha revisados sus previsiones fiscales. Lo publicado apunta que España cerrará el año con un 3% de déficit público, mismo valor otorgado en anteriores análisis y que otorga al país la garantía para mantenerse excluido del grupo de países afectado por un expediente por déficit excesivo. No obstante, la Comisión advierte de que España corre el riesgo de incumplir la reducción déficit comprometida en su plan de ajuste multianual.

El Gobierno europeo pronostica que España cerrará 2025 en un 2,6% para 2025, una décima por encima del 2,5% que recoge el plan de Hacienda, y en un 2,7% para 2026, superando en seis décimas el 2,1% del compromiso adquirido. En lo referido a la deuda pública, las previsiones económicas de otoño, publicadas este viernes, también anticipan que la ratio deuda/PIB seguirá disminuyendo gradualmente del 102,3% en 2024, hasta el 101,3% que estima Bruselas en 2025 y 101,1% para 2026.

La previsión está "muy en línea con las propias previsiones del Gobierno", ha valorado el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo. "De hecho la Comisión Europea anticipa también que ese crecimiento va a ser equilibrado porque va a ser compatible con un elemento de responsabilidad fiscal, sus previsiones con respecto a la evolución del déficit también están muy en línea con las previsiones del Gobierno, con un 3% para este año, ellos anticipan un 2,6% para el año 2025", ha añadido.

También se vaticina un descenso de la inflación este año hasta el 2,8%, frente al 3,1% que auguraba la Comisión en primavera, y se espera que siga bajando hasta el 2,2% en 2025 y al 2% en 2026.Además, el empleo crecerá un 2,3% en 2024 y al 2,1% en 2025. El dato más negativo lo presenta el desempleo que, si bien sigue bajando y se espera que cierre 2024 en el 11,5%, este dato tan meritorio para España es muy alto en comparación con la media de la eurozona (6,5%) y de la UE (6,1%).