La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Carmen Calvo, ha vuelto a restar importancia al adelanto de la reunión de la Comisión Permanente de Seguimiento del Acuerdo de coalición del PSOE y Unidas Podemos, circunscribiendo este movimiento a la "normalidad" del funcionamiento del Ejecutivo.

A preguntas de los medios antes de participar en el acto institucional con motivo del 8 de marzo del Gobierno de Castilla-La Mancha desde el Paraninfo Luis Arroyo de la UCLM en Ciudad Real, Calvo se ha reivindicado como vicepresidenta primera del Ejecutivo de Pedro Sánchez, afirmaciones realizadas en el contexto de fricciones internas dentro del Gobierno a cuenta de la elaboración y aprobación del anteproyecto de Ley de Libertad Sexual.

"Soy la vicepresidenta primera del Gobierno con mis funciones establecidas y a las órdenes directas del presidente, algo que no ha cambiado para nada, y soy militante de un partido que trabaja con su secretario general", ha enfatizado.

Calvo ha abundado en que estas reuniones de coordinación no son una novedad en el marco de un Gobierno bipartito, y se trata de citas que ya se han llevado a cabo en otros ejecutivos. Para la vicepresidenta, la única "novedad" es que ahora tienen lugar dentro del Gobierno estatal, pero "muchos ayuntamientos y comunidades autónomas ya han pasado por esta experiencia".

Esta "novedad" de que sea el Gobierno central el escenario de estas reuniones provoca que "salgan más noticias" y haya "más focos" encima. "No dejo de vivirlo con normalidad", ha reiterado.

Las "diferencias" entre PSOE y Podemos son para Carmen Calvo "las normales", y el hecho de que el anteproyecto de ley de Libertad Sexual no fuera finalmente aprobado en Consejo de Ministros esta semana se circunscribe en esa normalidad.

En este punto, ha señalado que también se ha quedado en el cajón "otro asunto" en el pasado Consejo de Ministros "y eso no ha sido noticia".

"Quien no es feminista, que se revise si es demócrata"

Asimismo, Calvo ha erigido la igualdad entre hombres y mujeres como el mimbre de la verdadera democracia, al tiempo que ha pedido a todo aquel que no se considere feminista que "se revise" si es demócrata.

Calvo ha colocado el feminismo como "la compuerta práctica y jurídica" frente a aquellos que quieren "volver hacia atrás con discursos que apoyan al machismo".

"Pero allí estaremos, y la buena noticia es que estaremos todas y todos, también todos los varones demócratas que hoy salen a las calles y que hace mucho tiempo se dieron cuenta de que su particular pelea por la democracia en este siglo tenía que ver con la pelea que traemos desde atrás las mujeres", ha afirmado.

Ha acentuado especialmente el papel de las feministas del pasado, quienes fueron "a terrenos vedados, valientemente, y no se han despistado ni un minuto". "Sabíamos que nos iba la dignidad personal".

Con todo, ha avisado que todo el que piense que el movimiento feminista se va a retirar, "tiene perdida la partida". "Se equivoca quien piense que todo esto no es un frente pacífico de batalla que no vamos a abandonar ni un solo instante", ha dicho, haciendo un llamamiento para "llenar las calles" en las manifestaciones del 8 de marzo.

Igualmente, ha celebrado que las mujeres "nunca se olvidan unas de otras", y es "difícil" encontrar una feminista que "no se acuerde de qué está pasando con mujeres de otras culturas y religiones y que están oprimidas"