Chuqu-chuqu-chú, en el tren la veintena larga de periodistas que formamos la caravana ha tardado muy poco en caer en uno de los grandes temas tópico que nos apasionan y en el que no podemos resistirnos a caer: “Otra caravana electoral más y ya van…”. Hay en el grupo quien lleva ya más de 20. Y se recuerdan anécdotas de coberturas anteriores “¿Te acuerdas de aquella vez en…?”  La nostalgia. Qué puñetera. Para entenderlo piensen en la mili. Quiero decir si son hombres y tienen más de 40 años. O piensen en una reunión de antiguos compañeros de colegio, de esas que se organizan tanto ahora que a la gente le ha dado por el furor de reencontrarse con l@s compañer@s de la infancia y la adolescencia gracias al “feisbuk”…  Pues parecido. Otra campaña, otra caravana.  “Te acuerdas de cuando…” Aunque en realidad, salvo excepción (en buena medida el que suscribe), los que van en la caravana son gente que se ve a diario o casi. Bueno, pero para la nostalgia siempre hay sitio.

León sale del mapa electoral para la caravana
Una de las periodistas, ya pasado Valladolid, se dio cuenta de algo que no deja de tener su punto. Es una periodista veterana, de un diario muy importante. Y lo que dijo: “Este ya es seguramente el último viaje que hace la caravana electoral a León”. Pues es verdad; ahora que Zapatero ha dicho que lo deja, que ya no será candidato, es muy improbable que los medios nacionales regresen en campaña a esta ciudad. Y luego la periodista y otros han especulado: “Si el candidato al final es Rubalcaba iremos a Santander”. “O a Jaén. O a Cádiz…”. “Sí, y a Toledo, que también fue candidato por Toledo”. “Y si es Chacón, pues empezaremos por Barcelona…”

Bueno, el caso es que sea uno o sea otro, es muy posible que como decía la compañera del periódico importante (y no de derechas, doy más datos) León se despida de convertirse en el centro de la política nacional cada dos o tres años…, cada vez que se inicia una campaña. Una pena. Soy corredor, modesto corredor eso sí (aunque, momento publicidad, acabo de publicar un libro de corredores, La pasión de correr) y al llegar a León me he ido a trotar media horita por la ciudad. Está preciosa. Limpia. Incluidas las afueras. Al menos por donde he corrido. El PSOE quiere que esto sea lo que valoren los votantes: el estado de sus ciudades, cómo funcionan los servicios públicos, la seguridad o la educación en sus barrios… Quién sabe, igual lo logran. Empeñados en ello, desde luego están.

 

 

 

 

 


Zapatero era tan tímido que se dudaba que fuera a ligar
Ya en el lugar del mitin, el Palacio de Deportes, mientras llegaban los candidatos, he buscado a alguien que pudiera darme un “güiquilik” de Zapatero antes de ser ZP. Y lo he encontrado. El infiltrado se llama Ángel Solares (está ahí, en la foto que ilustra este primer guiquilik”), un asturiano que lleva décadas viviendo en León y que conoce al actual presidente ¡desde 1983, cuando uno tenía 23 años –ZP-, y él, 34!

“¿Cómo era entonces aquel Zapatero? –esa ha sido mi pregunta- ¿era Bambi como decían antes, o el demonio con cuernos, como dicen algunos ahora?”. Dice Ángel: “Cuando le conocí era el secretario general del partido aquí. Y era muy tímido. Nos preguntamos, ¿pero cómo va a ligar este hombre? Y luego se le cruzó Sonsoles, ya ve. Pero políticamente era un monstruo… Yo le llamo así, “hola monstruo”, y él a mí igual, “hola monstruo”. Es un animal político”.

“¿Qué qué me parece que se vaya? –esa ha sido mi nueva pregunta-, pues mal. Tenía que haber rendido cuentas, vamos haberse presentado a las elecciones y defender su gestión. Y luego, si hubiera perdido, convocar un Congreso. Como Felipe… José Luis admiraba mucho a Felipe. Aprendía sus discursos y le imitaba. Pero no ha podido ser, entiendo que las presiones han sido muy fuertes”.

Nadie es profeta en su tierra, viejo dicho que no pierde actualidad
Es casi ya hora del mitin, empiezan a llegar el alcalde, y el candidato a la Comunidad Autónoma… Vamos acabando y me dice Ángel otro secreto: “¿Qué qué dicen de Zapatero aquí? Pues algunos dicen contra él las mayores burradas, porque ya lo decía mi padre: “Nadie es profeta en su tierra”. Pero también hay muchos que le quieren. Joder, que en 7 años nos deja inversiones por valor de 7.500 millones de euros, y el AVE a finales de año, y un Palacio de Congresos que va a ser la hostia… Y eso nos lo ha dado el Gobierno central, no el de la Comunidad”.

Ahora así, ahora acabamos, pero Ángel aún tienen una despedida: “Le vi empezar, y ya ves, nos vamos juntos. Yo también dejo de ser ahora parlamentario aquí, en Castilla y León, ya no me presento… Él tenía que haber rendido cuentas, haber defendido su gestión”, aún rezonga cuando nos despedimos.

Mañana la caravana se va camino de Valladolid. Pero el día es duro. Vamos a acabar en Gijón, mitin mediante. Habrá que madrugar. Tengo sueño sólo de pensarlo.