Después de las numerosas críticas que recibió el programa de MasterChef por cocinar un menú de comida catalana, cuando la prueba de semifinal se celebraba en Valencia, el responsable del área de entretenimiento de TVE, Toñi Prieto, ha pedido disculpas.

Fue durante el programa RTVE Responde, en el que ha pedido perdón “a los que se hayan sentido agraviados”. “No era nuestra intención y seguiremos yendo por todos los pueblos de España dando a conocer la gastronomía tan rica que tiene nuestro país”, dijo, y continuó hablando que no querían “excluir ninguna de las regiones y a ninguno de los platos típicos de cualquier ciudad”.

Para esta prueba de exteriores se pidió a los 15 concursantes que cocinaran cuatro platos típicos de Cataluña: Bacalao con su piel crujiente, Canelones de Rostit, Fricandó y Crema catalana con galleta. Los comensales fueron 30 falleros y falleras.

“Entendemos que los valencianos digan “estamos en mi ciudad ¿por qué no hacemos arroces?” Eso es lo que esperaban los concursantes, pero esto es un concurso y lo que hacemos es cambiarles el paso”, explicó Prieto durante el programa, y argumentó que hacen “un cambio de estrategia a los concursantes que saben que van a Valencia y se confían en que harán arroces”.

El responsable del área de entretenimiento, que se encarga de otros programas como Maestros de la costura, Prodigios o Hacer comer, defendió que el concurso de cocina tiene en cuenta “toda la gastronomía de todas las ciudades de España y de todas las comunidades” tras las quejas recibidas por esta última edición.

Además, Prieto ha admitido que esto haya sido una excepción: “Es verdad que cuando vamos a las regiones intentamos hacer productos de la zona, o platos característicos, pero la gastronomía española es muy variada, rica y transversal”.

“Lo que está claro es que no siempre hemos ido a una ciudad y hemos hecho productos exclusivos de esa ciudad” insiste el responsable, poniendo el ejemplo de Ibiza, donde “se hicieron otros platos que no tenían nada que ver con la gastronomía local”. Con esto ha negado las quejas de muchos seguidores del concurso, que decían que el caso de no realizar platos típicos valencianos en la comunidad autónoma no se había dado en ninguna otra localidad. “Hemos utilizado cuando se ha podido la gastronomía local, pero hemos ido a otras ciudades y hemos hecho otro tipo de gastronomía que no era la local”, siguió insistiendo.

En el otro lado de la polémica, José Carlos Torres, residente en Alboraira y uno de los espectadores que denunció lo ocurrido en la semifinal ante las cámaras de El defensor de la audiencia de RTVE decía que “si con un menú catalán quieren representar a la Comunidad Valenciana me parece que no han acertado en ningún momento”, y añadió que “en la prueba de Valencia, del 18 de junio, el menú no incluyó gastronomía valenciana sino catalana”.

Torres exigía que al menos pidieran perdón en el próximo programa de MásterChef de esta octava edición, y al final lo han hecho a través de este programa de quejas y sugerencias de la televisión pública.

Críticas por el bajo nivel de los concursantes

El defensor de la audiencia de RTVE, Ángel Nodal, defendió en esta misma emisión de RTVE Responde que “el entretenimiento es uno de los pilares de la programación y MásterChef, su principal emblema” justo antes de las reclamaciones de los seguidores.

Nodal no era la primera vez que hablaba sobre esta edición del programa culinario, ya con anterioridad comentaron “algunas quejas” por “el nivel culinario más bien bajo” de sus 15 concursantes. Por su parte, Toñi Prieto argumentó que “nosotros sí creemos que hay un buen nivel. Esto es un talent y vienen a aprender. Es decir, si saben de todo ¿Qué va a aprender? Esto es una escuela en la que tienen que ir evolucionando, mejorando y para eso entran en el programa”.