Hace un tiempo, los políticos se sentaban a debatir, en el sentido más amplio de la palabra. Hablaban sin necesidad de recurrir a dimes y diretes y se trataban con el respeto que les otorgaba un argumento sólido . Y lo hacían en la mesa de un programa o en la barra de un bar. 

Está claro que la política no consiste en hacer amigos, pero a lo mejor para salir de una pandemia mundial es pertinente recordar que el fin último de esta es trabajar en pos de la gente, en representar y presentar soluciones. Ha llegado un punto en el que la ciudadanía ni siquiera demanda la unión entre ellos, simplemente, que no la desunan a ella.

Son tiempos tristes para la política, pero en este juego del tú más, del donde dije Digo, digo Diego, del corre, ve y dile, no está de más saber que no siempre ha sido así y que hubo otros instantes en los que en las posturas, por muy distintas que fueran, coincidían, al menos, en los cosas más evidentes.

El Plural ha rescatado un episodio del programa 'La Tuerka', que hasta su desaparición en 2017 presentaban Pablo Iglesias, Juan Carlos Monedero y el humorista Facu Díaz. En esa ocasión, la mesa la presidía el exsecretario general de Podemos e invitaba a debatir sobre la corrupción del PPIsabel Díaz Ayuso Santiago Abascal. Los tres (incluida la diputada popular) reconocían que esa corrupción se estaba dando dentro del partido.

Pero no solo esto. Si analizamos el discurso de Abascal comprobamos cuánto han camiado las cosas. Por aquel entonces el líder de Vox agradecia a los medios de comunicación (que hoy veta su partido) el haber destapado diferentes casos de corrupción, entre ellos el caso Bárcenas."Debemos mucho a las pequeñas rendijas de libertad e independencia que ha habido en algunos medios de comunicación y que han sorteado el intento del poder político de condicionarles, señalaba.

El presidente del grupo de extrema derecha añadía, previa referencia al 15-M y al fin del bipartidismo: "Somos muchos los que nos hemos indignado con la corrupción. Creo que tenemos que ser mucho más exgente con los políticos y eso es algo que hemos aprendido en estos años".

Por su parte, Díaz Ayuso, aunque en una primera intervención defendía que no había más casos de corrupción entonces que antes, sí reconocía que este hecho "no exime a nadie" y hacía alusión directa a la trama Gürtel y a la monarquía.

Una jovencísima Díaz Ayuso fue también colaboradora del programa de Iglesias e, incluso, se fue "a tomar una caña" con él, tal y como corrobora el siguiente vídeo:

Sin embargo, parece poco probable que estas (como otras personas de tan contrario índole ideológico)  vuelvan a acercar posturas, por muy necesario que sea. Eso por no hablar de algunas palabras que hoy, resuenan vacías. ¡Maldita hemeroteca!