La Fundación “la Caixa”, con la colaboración de la Education Endowment Foundation (EEF) organiza un encuentro, organiza en CosmoCaixa el Global Partners Congress. En él se reúnen miembros de los ministerios de Educación del Reino Unido, España y Camerún; y a delegaciones de países como Australia, Italia, Portugal y Alemania, entre otros, además de instituciones como la UNESCO, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OECD), la Iniciativa Internacional para la Evaluación de Impacto 3ie, la organización J-PAL y las redes Teach For All y Campbell Collaboration. Se trata de un encuentro en el que se promueven las evidencias educativas para incorporarlas a la recuperación educativa pospandemia.

¿Pero qué son las evidencias educativas? La educación es una ciencia, y como tal, así como en la medicina o la tecnología, tiene que estar abocada a incorporar las evidencias surgidas de la investigación a la hora de diseñar, implementar y evaluar sus métodos y prácticas. Esas evidencias provienen de los resultados obtenidos por ciencias como la pedagogía, la psicología, la neurología o la sociología, entre otras. Su conocimiento permite, por lo tanto, mejorar los procesos de enseñanza y aprendizaje, para así tomar las decisiones adecuadas en todos los ámbitos, desde las formas más eficientes de promover el aprendizaje hasta los tipos de organización en las aulas que contribuyen a una mayor equidad. Es decir, involucra tanto a escuelas como a Gobiernos. Para ayudar en este sentido, EduCaixa acaba de renovar su toolkit, un catálogo accesible de herramientas educativas que abarca cuestiones como la reducción de ratios, la participación de los padres o la conveniencia de los deberes, que está a disposición de escuelas y maestros.

 

La directora de la EEF, Becky Francis, y la directora general adjunta de Fundación la Caixa, Elisa Durán, en el congreso de evidencias

La directora general adjunta de la Fundación ”la Caixa”, Elisa Durán, asegura que es esencial crear espacios en los que todos los agentes de la comunidad educativa puedan intercambiar y cocrear estrategias. “Creemos firmemente que la educación es la base del progreso social y del desarrollo sostenible. Por ello, llevamos años impulsando el enriquecimiento del aprendizaje de los alumnos y también la formación de los profesores y los directores de las escuelas. Queremos ser agentes activos del cambio y participar en el debate sobre el futuro de la educación de la mano de la comunidad educativa”, añade.

La pandemia ha podido revertir los logros en equidad en la educación, fundamentalmente si hablamos de niñas y mujeres.

Entre otros temas, en el encuentro se analiza el impacto negativo de la pandemia en el mundo de la educación. Se prevé que se puedan revertir los logros de las últimas dos décadas de igualdad (particularmente, en la educación de las niñas y las mujeres), además de que casi 24 millones de estudiantes podrían abandonar sus estudios debido al impacto económico de la crisis sanitaria. Entre los objetivos del congreso está el de exponer propuestas para poder incorporar las evidencias educativas en la necesaria recuperación educativa.

La directora ejecutiva de EEF, Becky Francis, por su parte, explica que “una investigación sólida sobre pedagogía y programas puede decirnos qué ha funcionado y qué no ha funcionado en escuelas similares y con alumnos similares. Al brindar esta información a los maestros, con independencia de dónde enseñen y del tipo de escuela en la que enseñen, podemos asegurarnos de que más jóvenes tengan acceso a una educación transformadora”.