La Fundación “la Caixa” ha contribuido con una ayuda de 2 millones de euros a un proyecto de investigación que ha desarrollado un nuevo medicamento de inmunoterapia CAR-T. Este medicamento se ha empezado a administrar a pacientes que padecen alguno de los tipos de linfoma (linfoma B difuso de célula grande, linfoma folicular, linfoma de células del manto), que no han respondido a otros tratamientos.
Se trata de un ensayo clínico liderado por el Instituto de Investigación del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, en el que también colaboran ISCII, el Instituto de Investigación contra la Leucemia Josep Carreras y el Banco de Sangre y Tejidos de Cataluña. El nuevo medicamento, que ha sido producido y desarrollado de forma integral en Sant Pau, está enriquecido en linfocitos T de memoria, que persisten más en el tiempo y así logran tener una mayor eficacia contra la enfermedad. En la Fase I del ensayo, en la que nos encontramos, se reclutarán diez pacientes, mientras que en la Fase II se incorporarán treinta más, llegando así a cuarenta pacientes en los próximos dos años.
Se calcula que durante este año se diagnosticarán casi 10 mil nuevos casos de linfomas no Hodgkin, el cáncer de sangre más común en nuestro país. Bien es verdad que la mayoría de los pacientes consiguen eliminar por completo la enfermedad, tanto gracias a la quimioterapia como al trasplante de médula ósea, pero muchos de ellos acaban recayendo después de un tiempo, y ante la recaída se ofrecen muy pocas opciones terapéuticas. La propuesta de Sant Pau brinda nuevas esperanzas, ya que aborda más del 80% de todos los linfomas. ¿Cómo funciona? Selecciona un tipo específico de linfocitos T (linfocitos T de memoria), que son muy eficaces, pero que se encuentran en un escaso número. Son células que se generan como mecanismo de defensa ante infecciones primarias y median contra infecciones sucesivas del mismo patógeno. Se trata, entonces, de células con memoria con un poderoso efecto contra células tumorales.
Los primeros resultados fueron presentados el año pasado en los congresos internacionales de Hematología más prestigiosos. El hecho de que este primer medicamento de inmunoterapia CAR-T30 (académico) ha atraído a pacientes de países tan dispares como Italia, Austria, Polonia o Rusia, entre otros. En la mencionada Fase I, que concluye, se ha podido demostrar que las células T de memoria CAR30 (HSP-CAR30) poseen un excelente perfil de seguridad. Traducido, significa que, además de su eficacia, tienen un nivel muy bajo de toxicidad, además de lograr una alta eficacia. La alentadora consecuencia es que el 50% de los pacientes tuvo una respuesta completa al tratamiento con desaparición del linfoma.
“Seleccionamos estos linfocitos T de memoria del propio paciente y los entrenamos para que cada vez que detecten a una célula tumoral, la eliminen. Así, de forma duradera, en el cuerpo del paciente quedaría un «detector y eliminador» de cualquier célula del linfoma que volviera a aparecer. En definitiva, es la modificación genética de los linfocitos T del propio paciente para que éstos ataquen células cancerosas”, explica el Dr. Javier Briones, responsable clínico del proyecto.
Sant Pau forma parte del proyecto europeo T2Evolve y tiene autorización de la Dirección General de Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia que depende del Ministerio de Sanidad para utilizar los medicamentos CAR-T. En este sentido, se puede asegurar que desarrolla proyectos de inmunoterapia CAR-T únicos en Europa, gracias a sus instalaciones de primer nivel y sus profesionales altamente cualificados y especializados. El equipamiento está específicamente diseñado para el desarrollo de medicamentos de terapia avanzada, lo que se traduce en la posibilidad de ofrecer tratamientos innovadores permanentemente. Para ello, ha sido fundamental la contribución de la Fundación Josep Carreras contra la Leucemia y la del Instituto de Investigación contra la Leucemia Josep Carreras, que consistió, entre otras ayudas, la adquisición de una parte importante del equipamiento y la provisión de fondos para la producción de fármacos para los diez primeros pacientes. Ya en 2020 se hizo el primer ensayo con un medicamento de inmunoterapia CAR-T, que fue el primero en Europa, para el tratamiento del linfoma de Hodgkin clásico y linfoma no-Hodgkin T CD30+ en recidiva o refractario.
En cuanto a la Fundación “la Caixa”, son ya 115 años de compromiso social para contribuir a una sociedad más justa y equitativa.