Las Cortes de Castilla y León han aprobado en el Pleno de la sesión de control a la Junta la creación de la comisión de investigación sobre la gestión de las residencias de mayores durante la pandemia del coronavirus. Los socialistas han contado con el voto favorable de la mayor parte del grupo Mixto -faltó la rúbrica de Vox que la apoya- y de la procuradora no adscrita María Montero, que abandonó Ciudadanos horas antes de la votación de la fallida moción de censura presentada en las Cortes contra el Ejecutivo de PP y Ciudadanoss.

Fue el pasado 29 de abril cuando los socialistas presentaron su iniciativa y desde cuando populares y naranjas han tratado de torpedear su puesta en marcha, aunque finalmente apostaron por pedir una comisión de investigación “más ambiciosa” que la propuesta por el PSOE. Con esto, el Gobierno autonómico buscaba ampliar el objeto de análisis “a todos” para que la investigación fuera “aséptica” y no “intencionadamente parcial”, como juzgan que es la impulsada por los socialistas, que ha sido apoyada por una “tránsfuga” en un acto de “absoluta corrupción parlamentaria”, aseguraba Raúl de la Hoz, portavoz del Grupo Popular, en clara relación a Montero.

Así, las filas de Mañueco e Igea aseguraban que no se opondrían, pero que no descartarían la comparecencia del exministro de Sanidad Salvador Illa y del exvicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, los dos ya fuera del Ejecutivo, y obviando que eran las autonomías quienes tenían el mando en las residencias.

La creación de esta comisión es uno de los efectos de la pérdida de la mayoría absoluta en las Cortes de los dos socios de Gobierno. El pasado mes de diciembre, el Ejecutivo autonómico pudo rechazar la misma iniciativa al contar con 41 escaños, ahora no lo han podido hacer al perder uno y quedarse en 40, en minoría.