Que Juan Carlos I haya abonado a Hacienda 678.393,72 euros para satisfacer una deuda tributaria relacionada con la investigación que lleva a cabo la Fiscalía del Supremo sobre con el presunto uso de tarjetas bancarias opacas ha ocasionado un auténtico aluvión de reacciones a lo largo de toda la semana. 

Entre todas, destaca la de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que ha llegado a decir que "la ley es para todos la misma, pero no todos somos iguales ante la ley". Sus polémicas declaraciones  han hecho que muchos miembros de su partido y de su Gobierno hayan sido preguntados por esta cuestión. 

Uno de ellos, ha sido el consejero de Justicia, Interior y Víctimas de la Comunidad de Madrid. En su respuesta, Enrique López, afirmó este jueves que el rey emérito tiene derecho a regularizar su situación fiscal como cualquier ciudadano, pero, en su defensa de Ayuso, introdujo otra peculiar apreciación, subrayando que "todos somos iguales ante la ley" pero que el principio de igualdad establece que los ciudadanos deben ser tratados "conforme somos", "igual a los iguales y desigual a los desiguales".

López, magistrado de carrera, hizo estas declaraciones a los medios de comunicación tras participar al acto de entrega del premio y las becas de la Asociación de Juristas y Profesionales del Derecho San Raimundo de Peñafort, y tras indicar que el ejecutivo regional "no puede ni debe valorar, ni dar ningún dato, respecto a la situación de ninguno de los contribuyentes" madrileños.

Asimismo, subrayó que "todos los ciudadanos tienen derecho a iniciar estos procesos" de regularización fiscal que "son iguales para todos los ciudadanos" y están "sometidos a la ley".

"El principio de igualdad que establece la Constitución no es tratar a todos igual", insistió, a pesar de que artículo 14 recoge que "los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social". 

A su juicio lo que indica la Carta Magna es " tratar a todos conforme a la situación específica de cada una de las personas. Es tratar igual a los iguales y desigual a los desiguales". "Todos somos iguales ante la ley y todos debemos ser tratados conforme somos", indicó.