La cruzada del Partido Popular de Isabel Díaz Ayuso contra la esposa del presidente del Gobierno, Begoña Gómez, ha tenido un revés colateral no previsto: el enfado y denuncia de las universidades públicas madrileñas ante las presiones ejercidas por el Ejecutivo de la Puerta del Sol.

Será en los próximos días cuentos los rectores de las seis universidades públicas de la región votarán “acciones extraordinarias” para solventar su crisis financiera, ya que el Gobierno madrileño tan sólo subirá un 0,9% las partidas destinadas a las universidades en sus Presupuestos 2025, teniendo a su vez en cuenta que Ayuso destina un 21% menos de media por alumno pese al 36,5% de renta per cápita de la Comunidad de Madrid.

La carta abierta -a la que se han sumado la Complutense, la Autónoma, la Carlos III, Politécnica, Rey Juan Carlos y la Alcalá-, sobre la cual el diario El País recoge parte de su contenido este miércoles, pone de manifiesto la “inestabilidad económica” en la que dichas instituciones educativas se están viendo afectadas y, motivo por el cual, no pueden “garantizar la calidad del servicio público”.

Según los presupuestos de Madrid en materia educativa y universitaria, tal y como vinieron adelantando sindicatos de la educación madrileña recientemente, y según reza en esta misiva, “no contempla las transferencias necesarias para afrontar el impacto de la inflación en los suministros, cubrir el incremento salarial acordado por el Gobierno central, ni financiar las exigencias de la nueva Ley de Universidades”; tampoco, según recogen los rectores, se da garantías para el mantenimiento de las infraestructuras.

Sobre ese incremento del 0,9% en la partida global de inversión para universidades -que se confirmó el pasado 31 de octubre-, resulta claramente insuficiente, ya que esta cifra se mantiene “idéntica” a la de este año, “pues la aparente subida corresponde únicamente a una parte del incremento salarial que ya fue aplicado a los empleados públicos en 2024”, lo que viene añadido al aumento de costes salariales y el encarecimiento de los recursos primarios.

Debido a estas razones de peso, las universidades públicas de Madrid califican su situación de “insostenible y crítica” que, en caso de no solventarse a corto plazo, podría acabar en “catastrófica” en los próximos años. Todo ello teniendo en cuenta que el sistema universitario de la región es uno de los que más volumen tiene del país, con unos 30.000 docentes y personal técnico como 220.000 estudiantes. Un agravante que se explica con la negativa del Ejecutivo de Ayuso a cofinanciar a otros 1.100 profesores ayudantes junto con el Ministerio de Universidades, como sí que lo hacen el resto de comunidades autónomas.

El rector de la Complutense condena las palabras de Ayuso

En la última sesión de control al Gobierno regional en la Asamblea de Madrid, Díaz Ayuso, encarándose a la oposición, llegó a decir que la Universidad Complutense es un centro “que toda la izquierda tiene colonizado” y que da “títulos como churros”, bajo el claro marco de la investigación judicial que se cierne sobre Begoña Gómez y su cátedra en dicha institución educativa.

Ante tales declaraciones, el rector de la UCM, Joaquín Goyache, entonó su condena diciendo que, además de que las palabras de Ayuso son “injustas y falsas”, infringen un “daño irreparable al prestigio de una institución académica que es un pilar esencial de la formación superior en España y que goza de un reconocimiento internacional ampliamente merecido”, defendió en un comunicado este lunes.

En este punto, recordó a la presidenta madrileña que ella misma se licenció en la Complutense, así como que años después recibió el título de Alumna Ilustre, por lo que las declaraciones de Ayuso al respecto le han resultado totalmente desafortunadas.  “La UCM ocupa el puesto 164 en la última edición del prestigioso ranking QS World University, situándose como una de las mejores universidades del mundo, ocupando, por primera vez en la historia, la mejor posición entre las universidades españolas”, añadió.

Asimismo, Goyache quiso hacer el inciso de que las universidades deben ser apartadas del debate político e ideológico para no caer en una situación como la actual: “Como centros de conocimiento y pluralidad de ideas, no son, ni deben ser, reducidas a caricaturas ideológicas. Acusaciones como estas no reflejan la realidad de la diversidad y excelencia que caracterizan a la UCM”, subrayó.