La última medida del Ayuntamiento de José Luis Martínez-Almeida para combatir el sofocante calor de verano en la capital ha traído cola de críticas en los últimos días. Una hilera de toldos colocados en zonas estratégicas de la Puerta del Sol buscan situar zonas de sombra artificial en uno de los puntos más transitados del centro de Madrid; una medida que el alcalde ha defendido a capa y espada ante la negativa de la oposición de izquierdas.

El principal mandatario del Palacio de Cibeles ha defendido este lunes la instalación de estos toldos en una parte de la Puerta del Sol, asegurando así que “por primera vez habrá sombras” en esta emblemática plaza. Unas palabras que vienen a cuestionar la postura adoptada por la oposición de Más Madrid, formación a la que ha reprochado que cuando estuvieron al cargo del Ayuntamiento, en la etapa de Manuela Carmena, “no plantó ni un geranio”.

"Ojalá la izquierda siga con estas polémicas, ojalá la izquierda entienda que todo el problema de la ciudad de Madrid son los toldos de Sol, ojalá que la izquierda siga insistiendo en que es un escándalo que no haya vegetación y árboles en Sol cuando no lo ha habido nunca", le ha reprochado Almeida.

En los mismos términos, ha venido defendiendo la voz de los madrileños quienes dice que “agradecen” que ahora la Puerta del Sol “por primera vez es peatonal, que por primera vez haya sombras en las que uno se pueda refugiar y que por primera vez sea un espacio completamente accesible para los peatones, algo que sólo ha pasado con este Gobierno”.

Prosiguiendo la línea de reproches hacia la izquierda madrileña, Almeida ha asegurado que bajo su mandato ha plantado “200.000 árboles y se van a plantar medio millón más”, una afirmación que dista de ejemplos recientes como las obras que se llevaron a cabo en la Plaza Santa Ana o en el barrio de Montecarmelo.

"Les molesta que donde ahora mismo hay asfalto en la Castellana, en el ámbito de las Cuatro Torres, va a haber zonas verdes, y que donde ahora mismo hay 16 carriles de la M-30 va a haber una zona verde o que donde ahora hay una autovía urbana y ellos colocaron semáforos, se está cerrando para que haya 80.000 metros cuadrados de zonas verdes. Que sigan con este tema, que sigan hablando de una Puerta del Sol en la que no hicieron nada y en la que no plantaron un geranio, en la que no adoptaron ninguna medida para mitigar el calor y en la que seguían circulando coches y autobuses. Que sigan equivocándose porque para mí es bueno", ha reiterado el alcalde en defensa de su gestión.

Izquierda, redes y hemeroteca retratan la gestión de Almeida

A mediados de este mes de junio las obras que comenzaron en la Puerta del Sol comenzaron a vislumbrar su cometido. La instalación de los toldos colocados junto a la estatua del Oso y el Madroño y al término de las calles Montera y Preciados han tenido un coste de las arcas públicas de 1,5 millones, que se suman a los 13 millones invertidos en el contrato de la reforma completa de la Plaza del Sol.

Los 32 toldos están colocados sobre una hilera de bancos en la zona norte de la plaza. Están hechos de PVC microperforado y de una tela que no es opaca, ya que deja pasar el agua y el aire por sus diminutas perforaciones. A su vez, cabe recordar que esta instalación estará presente en la Puerta del Sol durante cuatro meses, ya que será retirada en octubre, cuando se pase la temporada de calor y con previsión de poder volver a ser instalados en el próximo verano.

Lo cierto es que la hemeroteca rescata el escenario de calor que se ha ido incrementando a lo largo de los últimos años en la Puerta del Sol, siendo un hervidero difícilmente de atravesar en las horas más sofocantes del día. Sin ir más lejos, el verano de 2024 se llegaron a registrar 65 grados en Callao, 63,5 en la Plaza Mayor y 54,8 en la Puerta del Sol.

Un recorrido por los últimos años, de la mano con las numerosas olas de calor que se han sucedido en verano, que también denota la proliferación de la tala de árboles en la capital. Ejemplo de ello, en el tramo de 2019 y 2023 en Puente y Villa de Vallecas se perdieron 5.102 árboles. También otras zonas como Madrid Río, Arganzuela, Montecarmelo y la Plaza de Santa Ana han sido escenario de esta deforestación de zonas verdes.

Bajo este contexto, las redes sociales han sido la plataforma en la que más críticas se han vertido contra los toldos de Almeida, debido a que no terminan de frenar los efectos de las altas temperaturas que se experimentan en la capital en esta época.

 

 

Asimismo, voces de la izquierda madrileña han clamado contra esta iniciativa medioambiental. “Necesitamos más árboles, menos asfalto y un urbanismo que reduzca el efecto isla de calor en nuestras ciudades”, defendió este fin de semana la líder de Más Madrid y ministra de Sanidad, Mónica García, en redes sociales.

 

En los mismos términos se postuló la líder socialista Reyes Maroto en los últimos días: “Son un ejemplo de mala praxis en materia de urbanismo. No es una solución ni buena, ni bonita ni barata”, lamentó en declaraciones a la prensa.

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