El giro del Partido Popular hacia Vox parece estar llegando a todos los territorios, incluso a aquellos en los que los populares gozan de mayoría absoluta y los ciudadanos le han dado la espalda a la ultraderecha como es Galicia. 

Si bien en los tiempos en los que lideraba la formación gallega Alberto Nüñez Feijóo este presumía de moderación y de no tener nada que ver con el partido de Santiago Abascal, su cambio de cara tras aterrizar en Madrid parece haber contagiado a su sucesor en el cargo, Alfonso Rueda.

El presidente gallego no ha dudado en rechazar "la demonización" de Vox, defendidendo que es "un partido constitucional", y en la más pura línea del PP de Isabel Díaz Ayuso ha completado su argumento contraponiéndolo con Bildu, que llevó a condenados de ETA en sus candidaturas de las pasadas elecciones municipales del 28 de mayo. "Vox no ha hecho eso, ni creo que lo hagan jamás. Ahí todavía, sinceramente, creo que hay diferencias", ha afirmado. 

Rueda se ha pronunciado en estos términos tras ser preguntado durante una entrevista concedida a Europa Press por la relación de su partido con el de Abascal y sobre si comparte las impresiones del presidente andaluz, Juanma Moreno, sobre que dan "más miedo" algunos de los dirigentes de la ultraderecha que Bildu o ERC.

Del mismo modo, ha rechazado juzgar a compañeros de su partido que han optado por la vía de aliarse con Vox para formar gobierno, insistiendo en que repudia "la demonización de cualquier intento de pactar con Vox" frente a la "bendición y absoluta normalidad" en el espectro de la izquierda de hacerlo, por ejemplo, con formaciones independentistas, algunas con "prófugos de la justicia" que han puesto en riesgo "el Estado constitucional", en alusión a Junts y Carles Puigdemont.

En este punto ha defendido que en Galicia no ha sido necesario un acuerdo con la ultraderecha pero no ha respondido a qué haría si necesitase su apoyo en los próximos comicios. La clave para no haberlos necesitado hasta ahora, ha esgrimido, ha sido que "aquí damos batallas culturales y de identidad de Galicia que entienden muchos votantes" y que "el PPdeG es el partido que más se parece" a esta tierra. 

A su juicio, Vox nació "en un momento de debilidad evidente" del PP en el ámbito estatal, pero ahora, eso podría cambiar con la capacidad de Feijóo para volver a aglutinar el voto de este espectro ideológico. 

Feijóo, a la investidura

En otro orden de cosas, en relación a una posible investidura de Alberto Nüñez Feijóo como presidente del Gobierno, Rueda ha recalcado que fue el ganador y que no solo tiene "todo el derecho", sino que "debe" ir a la investidura "siempre y cuando se lo proponga" el rey Felipe VI. 

A esto ha añadido que debe hacerlo, además,  "con más fuerza y más razones" después de la "absoluta soberbia" del presidente del Gobierno en funciones, el socialista Pedro Sánchez, en su respuesta a la carta que le envió el líder del PP. 

Rueda se niega a aceptar que Feijóo no tenga opciones de lograr entrar en La Moncloa e incide en que para ello es necesario que "haga movimientos" y "busque apoyos". "Pero, sinceramente, creo que es lo que está haciendo", ha remarcado.

Y antre voces como la de Esperanza Aguirre que apuntan a un cambio de liderazgo en el PP y señalan a la presidente madrileña, cierra filas en torno a su antecesor: "Estoy seguro de que no hay nadie ahora mismo en el PP que suscite el apoyo unánime que suscita Alberto Núñez Feijóo. Incluida la señora Ayuso", ha apuntado, restando importancia a algunas intervenciones de esta en relación a ese asunto.

Rueda ha precisado que no cree que la dirigente madrileña tenga "intención" alguna diferente a la de él mismo, "con independencia de frases más o menos afortunadas". "A veces quieres expresar algo y no te sale bien", ha justificado.

Normalizar las visitas del emérito

Preguntado por la reciente visita el rey emérito a Sanxenxo, el presidente gallego ha expresado que, si bien su primera estancia "tuvo una exposición mediática quizás excesiva", hay que "normalizar" estos viajes a la comunidad.

Asimismo, ha reconocido que no tuvo la oportunidad de hablar ni de reunirse con él, pero que estaba "informado" de sus movimientos por el alcalde de la localidad,Telmo Martín.

Sobre qué le parecería que Juan Carlos I adquiriese una casa en Galicia, ha sido contundente: "Le diría que haga lo que estime oportuno y no me tengo que meter mucho más en eso".