El Parque Nacional de Doñana se ha convertido en la primera reserva ecológica que ha sido expuldada de la lista verde de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), la mayor organización ambiental del mundo. La mala gestión de la Junta de Andalucía durante el mandato de Juan Manuel Moreno Bonilla al potenciar la agricultura intensiva, el turismo y los efectos de la sequía han hecho salir a la joya nacional de la lista tras el deterioro de la biodiversidad. Ninguno de los 77 enclaves en 60 países había abandonado esta prestigiosa lista que hace referencia a la sostenibilidad y la conservación de los entornos naturales.

La noticia, adelantada este lunes por El País, fue conocida por la Junta de Andalucía hace dos semanas vía carta. La decisión se tomó después del análisis de diez expertos independientes que durante dos años evaluaron la gobernanza y conservación del Parque Nacional tras detectar un declive de su fauna y flora al no cumplir con los estándares.

Pese a que la organización confirma que Doñana ha salido de la misma, la Junta niega haber recibido notificación alguna. “La Consejería no ha recibido ninguna carta oficial de UICN indicando que Doñana haya salido de la lista verde”, indica El País citando a portavoces de la Junta. En cualquier caso, más allá de negar la evidencia, lo cierto es que excluir de la lista al parque supone un desprestigio internacional que tiene como inicio la ley para ampliar los regadíos que en marzo quiso poner en marcha el presidente andaluz. Según los expertos, aumentar los regadíos perjudica directamente la ya precaria situación de la reserva. Tras la presión, tuvo que retirar la ley y hace tres semanas llegó a un acuerdo de 350 millones con el Ministerio para la Transición Ecológica.

A finales del 2020 un grupo de diez expertos estudió al detalle la situación del parque y las políticas que llevaban a cabo en la dirección del parque. En enero entregaron el informe y en primavera otro equipo, ahora de verificación externo alemán, comprobó que no existían incompatibilidades y que los expertos siguieron el procedimiento establecido y correcto para afirmar que Doñana estaba en declibe.

La Junta intentó que Doñana fuera excluída de la lista y dirigió una misiva a la UICN quejándose de la decisión. La presión gubernamental surgió efecto y el organismo evitó anunciar la salida de la lista este verano. En el examen evaluado por dos grupos independientes, Doñana solo había aprobado 17 de los 50 indicadores evaluados (el 34%). Los criterios establecidos fueron la buena gobernanza, el diseño y la planificación del parque, la administración efectiva y la conservación exitosa. Doñana solo aprobó, y raspado, el diseño y planificación con un 54%. También tuvo cero de cinco indicadores en la conservación exitosa.

A respuesta al citado medio, el consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, Ramón Fernández-Pacheco; Juan Pedro Castellano, director del parque, cuenta con toda la confianza del Ejecutivo del PP.