La extrema derecha, representada por el tándem de Partido Popular (PP) y Vox, continúa desplegando sus tesis racistas y xenófobas en las instituciones políticas que parasita. El último territorio afectado es la Comunitat Valenciana, donde las dos formaciones ultras han aprobado el nuevo Plan Estadístico 2025-2028, que contemplará la diferenciación de la población migrante en diversas materias. Carlos Mazón sigue cediendo al chantaje de los de Santiago Abascal y, con tal de mantener el sillón que le libra de comparecer por su gestión de la DANA, no ha dudado en aceptar un nuevo señalamiento de la población más vulnerable.

Vox pide diferenciar entre “población nacional y población migrante” en lo que respecta a “la contribución neta al Estado del bienestar”, “la recepción de ayudas”, “el uso de servicios de urgencias sanitarias”, “la cantidad de donantes de sangre” y “el absentismo laboral”. En el último de los casos, además, también pide distinguir entre hombres y mujeres y en función del rango de edad. María Teresa Ramírez, Joaquín Alés y José María Llanos firman esta propuesta que han sacado adelante con el apoyo necesario del Partido Popular.

Han pasado de medir la exclusión a medir a los excluidos

La propuesta propia del PP, aprobada a su vez con los votos de Vox, tampoco se quedaba corta, dado que contempla la eliminación de estadísticas sobre vivienda o referidas al uso del valenciano en la administración, pero propone sumar estadísticas taurinas y relacionadas con el número de “niños y niñas migrantes sin referente familiar”. “Buscan convertir la vulnerabilidad en sospecha y la infancia en titular de tertulias. Quieren poner cifras donde debería haber inversión y etiqueta donde debería haber derechos”, ha denunciado el representante de los socialistas valencianos (PSPV), José Antonio Díaz. “Han pasado de medir la exclusión a medir a los excluidos”, ha resumido.

Un plan abiertamente xenófobo

Durante la celebración de Comissió d'Economia, Pressupostos i Hisenda, las formaciones de izquierdas, PSPV y Compromís, han puesto el grito en el cielo ante la más que evidente xenofobia contemplada en las propuestas, lamentando la “rendición total del PP ante la ultraderecha”. “Esto no es política pública, es ideología del odio con sello institucional. El PP ha decidido poner números a los prejuicios de Vox”, ha ahondado el portavoz socialista de Economía en Les Corts.

“Es un intento descarado de criminalizar a la población migrante y de normalizar el racismo desde el Boletín Oficial”, ha cargado Díaz, lamentando el uso de las estadísticas como “un instrumento de control y no de conocimiento”. “Que el PP acepte diferenciar quién usa la sanidad o quién dona sangre según su nacionalidad es sencillamente repugnante. Es lo más alejado que se puede estar de una democracia moderna y decente”, ha añadido.

“Con este paso, el PP no solo degrada la política, degrada también las instituciones. Han convertido el Plan Valenciano de Estadística en un manual de prejuicios y sospechas, diseñado para señalar al diferente”, han expuesto desde el PSPV. “Cada tabla, cada cifra y cada encuesta que el PP haga con esta lógica, será una marca más de su vergüenza. La estadística debe servir para proteger derechos, no para legitimar la xenofobia desde el poder”, ha zanjado el portavoz.

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