El juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena ha acordado retirar las órdenes europeas de detención dictadas contra el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y los exconsellers Antonio Comín, Lluís Puig, Meritxell Serret y Clara Ponsatí. Su decisión deja sin efecto la petición de colaboración solicitada en su día por la juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela.

El magistrado ha tomado esta decisión para evitar que la justicia belga interfiera en el proceso y argumenta que está investigando "un delito de naturaleza plurisubjetiva dotado de unidad jurídica inseparable", lo que requiere una única contestación para evitar respuestas contradictorias.

Por ello, "la depuración de las distintas responsabilidades penales deba ser llevada de manera unificada, pues de otro modo podría romperse la continencia de la causa y conducir el proceso a respuestas contradictorias y divergentes para los distintos partícipes", ha argumentado. 

mantiene la orden de detención por lo que, en caso de que regresen a España, serían detenidos de inmediato.