El ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, ha enviado un telegrama a los embajadores y cónsules de España detallando con las instrucciones a seguir de cara a las elecciones del 21D en Cataluña. El Gobierno no quiere que ningún catalán residente en el extranjero se quede sin votar en los comicios del 155. Por ello, el ministro Dastis ha enviado unas misivas, a las que ha tenido acceso ELPLURAL.COM, en las que insta a las Oficinas consulares a abrir en fines de semana y ampliar horarios.
Mariano Rajoy disolvió el Parlament de Catalunya, cesó al ya expresident de la Generalitat Carles Puigdemont, al exvicepresident Oriol Junqueras, así como al resto integrantes del Govern; y rápidamente se activó el protocolo: paralización de sueldos, ceses oficializados en el BOE… El día 21 es el día fijado en rojo en el calendario y Exteriores ya se ha puesto manos a la obra. En un telegrama, insta a las embajadas y consulados a mantener abierto un servicio de consulta entre los días 3 y 10 de noviembre, ambos inclusive.
Dastis ha pedido a los embajadores y cónsules que “amplíen los horarios de atención al público, para tareas de información, inscripción de no residentes etc.”. En consecuencia, las Oficinas consulares deberán permanecer abiertas los fines de semana del 4 y 5 de noviembre y del 18 y 19 de noviembre.
Sobre el horario de las delegaciones durante las jornadas fijadas para votar (17, 18 y 19 de noviembre), “se enviarán instrucciones más adelante”.
Según han confirmado a este periódico trabajadoras de Oficinas consulares, algunas embajadas ya han comenzado a abrir al público desde el pasado domingo 29 de octubre.
Las embajadas, un eje clave en la cuestión secesionista
Poco ha tardado el ministro de Exteriores en dar instrucciones a las embajadas y consulados de cara a las elecciones del 21D. Un gesto que contrasta con las órdenes que dio Dastis de cara al 1-O. Y es que, tal y como desveló en exclusiva ELPLURAL.COM, las embajadas recibieron un mandato clarividente, inequívoco: no facilitar información sobre el referéndum ni permitir la votación.
Una trabajadora de un consulado declaró a este periódico que “Exteriores nos ha pedido que no se les deje votar a los catalanes residentes en el extranjero en el referéndum. No les pueden llegar papeletas ni pueden tener derecho a ir a votar”. Las mismas fuentes subrayaron que no solo no se les puede facilitar papeletas, sino que tampoco se les puede proveer de información: “Si los catalanes preguntaban no se les podía responder”.