El Gobierno de Castilla-La Mancha y la Fundación Amancio Ortega han firmado este lunes un acuerdo de colaboración por valor de 11,24 millones de euros destinado a financiar una decena de proyectos en el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo, centro de referencia nacional e internacional en el tratamiento de lesiones medulares complejas.
El convenio ha sido suscrito por el presidente regional, Emiliano García-Page, y la presidenta de la Fundación, Flora Pérez Marcote, durante un acto celebrado en la sede de la Fundación en A Coruña. El jefe del Ejecutivo autonómico ha calificado la jornada como "un día de enorme gratitud como presidente", subrayando la importancia de esta colaboración público-privada para fortalecer uno de los centros más emblemáticos del sistema sanitario castellano-manchego.
"Castilla-La Mancha hoy recibe ni más ni menos que 11 millones de euros de Amancio Ortega, de su fundación, del principal grupo industrial textil de España en el mundo. 11 millones que van a ir dirigidos a Parapléjicos, nuestro buque insignia, un centro de gran referencia nacional e internacional", ha destacado García-Page en un vídeo remitido a los medios.
Nuevo quirófano de altísima tecnología y modernización de infraestructuras
El presidente ha explicado que una parte de los fondos se destinará a un nuevo quirófano integrado de altísima tecnología, un proyecto que se suma a otras actuaciones orientadas a modernizar las infraestructuras sanitarias y potenciar la innovación médica. En sus palabras, "muestras de generosidad como estas son dignas de alabanza. Ya las hemos tenido en el pasado con la misma fundación, por eso estoy enormemente satisfecho".
La inversión permitirá desarrollar proyectos clave como la adquisición de equipos robotizados de vanguardia, la creación de nuevas unidades de investigación científica, programas de alta formación para profesionales y un programa de rehabilitación intensivo y personalizado para mejorar la función de la mano en pacientes tetrapléjicos mediante técnicas de estimulación cerebral.
Más de 35.000 pacientes atendidos en sus 50 años
Durante sus más de 50 años de trayectoria, el hospital ha atendido a más de 35.000 pacientes siguiendo el modelo de rehabilitación integral ideado por Ludwig Guttmann, combinando el tratamiento clínico con la reintegración social y laboral. Entre sus hitos figuran la implantación de marcapasos diafragmáticos, las primeras cirugías de la mano tetrapléjica, la creación de la Unidad de Sexualidad y Reproducción Asistida y la incorporación de tecnologías pioneras como exoesqueletos, sistemas de realidad virtual o el robot de rehabilitación Lokomat.
El centro toledano, considerado el principal referente nacional en el abordaje de lesiones medulares complejas, se ha caracterizado por su capacidad para combinar la investigación científica con la atención personalizada, convirtiéndose en ejemplo de colaboración entre equipos médicos, ingenieros y terapeutas.
Por su parte, la Fundación Amancio Ortega mantiene una activa implicación en el ámbito del bienestar social y la salud pública. Su colaboración con entidades y administraciones ha permitido impulsar proyectos como el Centro de Rehabilitación Neurológica de la Fundación NIPACE en Guadalajara, y ahora amplía su compromiso en Castilla-La Mancha con esta aportación de más de once millones que contribuirá a situar a Toledo en el epicentro nacional de la investigación y la innovación médica.
El acuerdo rubricado hoy reafirma la apuesta de Castilla-La Mancha por una sanidad moderna, innovadora y centrada en las personas, y consolida al Hospital Nacional de Parapléjicos como símbolo de excelencia científica y humana en la atención a pacientes con lesión medular.