Esta semana, el Ministerio de Sanidad hacía un llamativo cambio de previsión sobre la cepa británica del coronavirus. En diez días, Fernando Simón pasaba de asegurar que el impacto de la cepa británica en nuestro país sería “marginal” a pronosticar que si la cepa británica del coronavirus evoluciona como lo ha hecho en el Reino Unido, "a medidos de marzo" será dominante en España en un 40 o 50 % de los casos”.

Por su cambio de postura, Simón ha sido fuertemente criticado en medios de comunicación y partidos políticos conservadores. Pero el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias no ha sido el único dirigente que ha cambiado drásticamente de parecer en pocas horas de diferencia. Como muestra, basta con observar el cambio de postura de Isabel Díaz Ayuso.

Y es que la presidenta de la Comunidad de Madrid ha pasado de afirmar en solo cuatro días que no adoptaría más restricciones que perjudicaran a la hostelería, a anunciar este viernes duras medidas que provocarán un grave perjuicio a los hosteleros. De hecho, cifran en 7,2 millones lo que los hosteleros perderán cada día por las nuevas restricciones en Madrid.

Lo que dijo Ayuso el martes 19 de enero

El martes 19 de enero, la presidenta de la Comunidad de Madrid se mostró contraria a que se adelantase el toque de queda en Madrid como ya planteaban otras comunidades autónomas. "Para arruinar aún más a la hostelería en España (...) Conmigo que no cuenten. No puedo ser más clara”, afirmó la presidenta regional.  

Lo que anuncia el Gobierno de Ayuso el viernes 22 de enero

Este viernes 22 de enero, el Gobierno de Ayuso ha adelantado que prohíbe desde el lunes las reuniones de personas que no sean convivientes en las casas y adelanta el toque de queda de las 23 a las 22 horas.

Además, como medida para frenar el avance del coronavirus, la hostelería tendrá que cerrar a las 21 horas y en estos establecimientos solo podrán reunirse cuatro personas.

Así lo ha anunciado el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero; acompañado del viceconsejero de Salud Pública y Plan Covid-19, Antonio Zapatero; y la directora general de Salud Pública, Elena Andradas.

"Estamos es un nuevo escenario que obliga a cambiar las reglas del juego", ha reconocido el titular de Sanidad.

Los hosteleros denuncian un “cierre encubierto"

Ante este cambio de postura de Ayuso, los hosteleros han denunciado las nuevas restricciones son "un cierre encubierto" de los restaurantes y bares madrileños.

De hecho, Hostelería Madrid ha estimado que la reducción de seis a cuatro comensales en bares y restaurantes en la región supondrán unas pérdidas diarias de 7,2 millones de euros y un 40% menos de actividad ya que se "limita gravemente" el servicio de comidas de trabajo entre semana y las comidas familiares en fin de semana.

"Esta situación viene a agravarse todavía más con el adelanto de la hora de cierre a las 21 horas, que adelanta una hora más el cierre establecido en las 22 horas el pasado lunes 18 de enero. Las cenas en los establecimientos de hostelería de la región pasan de estar limitadas a ser imposible dar el servicio", han denunciado.

En el contexto actual, Hostelería Madrid ha subrayado que la acumulación de medidas de restricción impuestas a la hostelería deja a los negocios en "pérdidas" y con una facturación “mermada”.