Nuevo revés judicial del activista y doctor granadino Jesús Candel, conocido en las redes sociales como ‘Spiriman’, a quien la Audiencia de Granada no solo no ha dado la razón en una denuncia que interpuso contra antiguos responsables del Hospital Virgen de las Nieves, sino que le impone un severo correctivo verbal al advertirle de que sus imputaciones "rozan la temeridad procesal".

En su denuncia, que contenía graves acusaciones de delitos contra la salud pública, acoso, malversación y prevaricación, Candel aludió irregularidades en la gestión de fondos públicos debidas a supuestas "decisiones de derivación de pacientes afectados de riñón que pudieran derivarse a centros privados o la elección e imposición a los médicos de la unidad de Nefrología de determinados fármacos favoreciendo a concretas empresas del sector".

En su auto de archivo, la Sección Segunda de la Audiencia advierte de que estas acusaciones "no pasan de la mera sospecha o suspicacia, pero sin dato concreto que corrobore esas irregularidades" y recalca "que sin datos del control de gastos de la gerencia y del propio Servicio de SAS, resultan de nuevo insuficientes para iniciar una investigación" a la administración competente.

Queda desestimado así el recurso de Candel como presidente de la Asociación Justicia por la Sanidad contra el auto del juzgado de Instrucción que decidió archivar el asunto con anterioridad y confirma esta resolución. El tribunal mantiene que la denuncia de Candel está "cargada de sospechas, insinuaciones y especulaciones" y descarta los hechos que se le atribuyen.