Concha Ramírez Naranjo es casi con toda seguridad la última alumna con vida de Antonio Machado. A los 13 años, recibió clases de francés del poeta durante el curso 1935-1936 en el Instituto Calderón de la Barca en Madrid. Concha, hija del coronel republicano Angel Ramírez, tuvo el mismo destino que su maestro, con el que coincidió en Valencia y en Figueras antes de pasar la frontera hacía el exilio donde permaneció casi cuarenta años.

Colabora con la Asociación Guerra-Exilio y Memoria Histórica de Andalucía
Ahora, a sus 90 años, en perfecto estado de salud y mental, vive en Dos Hermanas y mantiene vivos los recuerdos de aquel hombre con cara de buena persona, de buenos modales, serio y que según sus palabras: “aparentaba tener más edad”. Se mantiene activa dentro de la Asociación Guerra-Exilio y Memoria Histórica de Andalucía, con la que ha participado en numerosos actos.

Auswitz y su destino
Al cumplirse 75 años de la muerte del poeta, recuerda su muerte, y la visita que hizo a su tumba en Colliure, de donde conserva algunas imágenes. Pero a Concha Ramírez el destino tras la frontera le guardaría intensas vivencias. Se casó con un joven francés internado en el campo de exterminio de Auswitz que conoció a través de unas cartas a su familia. Aprendió alemán a la perfección y eso le valió para poder buscarse la vida durante los años cuarenta.