Una de las hermanas de Manuel García Caparrós, el joven sindicalista asesinado en aquella multitudinaria movilización histórica para el pueblo andaluz del 4 de diciembre de 1977, ha acusado el voto en contra del Partido Popular en la votación para la desclasificación de los archivos para conocer toda la verdad que, hasta el momento, permanece oculta del día que una bala que acabó con la vida del joven malagueño.

Dolores García Caparrós ha trasladado su "sorpresa" al conocer al voto en contra del Partido Popular, señalando, con una voz desilusionada a los micrófonos de Cadena Ser, que "no entiende" cómo es posible que un partido que gobierna en Andalucía niegue la posibilidad de acceder a los archivos de su hermano, máxime cuando se trata de un Hijo Predilecto de Andalucía, nombrado a título póstumo en 2013.

"Está reconocido como Hijo Predilecto de Andalucía, ¿Cómo puede un Partido Popular que está gobernando Andalucía, que está gobernando a los andaluces, cómo lo echa para atrás? Es que no lo entiendo, de verdad", ha expresado.

El Congreso ha aprobado la norma que regula el archivo de la Cámara para permitir el acceso a los documentos. Esta normativa ha sido aprobada por la Mesa del Congreso con los votos de PSOE y de Sumar y el voto en contra del PP. Esta nueva norma modifica, amparándose en la Ley de Memoria Democrática, una excepción para los accesos a los archivos. Básicamente, la Mesa regula que si es un familiar de una persona que está ligada a uno de estos documentos la que quiere acceder a un archivo clasificado se le permitirá dicho acceso, superando la norma que hasta ahora lo impedía.

García Caparrós era un joven sindicalista de CCOO que, tal y como ha descrito su hermana Dolores, el únio arma que portaba era una bandera de Andalucía, al igual que tantos otros manifestantes en aquel 4 de diciembre de 1977. Una fecha que se ha quedado en la retina del pueblo andaluz por marcar el comienzo, con la fatídica muerte de Caparrós mediante convertido en mártir del poder andaluz, de lo que desenvocaría en la consecución de la autonomía plena y el reconocimiento de nacionalidad histórica para Andalucía.

Hoy, 48 años después, el partido que gobierna Andalucía consuma una "traición" a la memoria de su propio pueblo, a la memoria de su autonomía y a la memoria de un Hijo Predilecto de la Comunidad.