La Junta de Andalucía ha declarado como “estratégico” un nuevo macroproyecto urbanístico que tendrá efectos en el suministro hídrico de Coín, una región que se define por sus miles de hectáreas de cultivo y 1.600 agricultores, célebres por su huerta, sus naranjas y sus tomates clase huevo de toro. La Junta de Andalucía introduce en la Unidad Aceleradora de Proyectos de Interés Estratégico la urbanización que está promovida por la familia Franco.

Los 24.309 habitantes de Coín viven en el Valle del Guadalhorce, una región que goza de la recepción de ramblas y escorrentías que permean hacia un acuífero de roca caliza bajo los Llanos de Matagallar (Coín). Sin embargo, el horizonte cambiará con el nuevo macroproyecto de Nature Call Initiatives, S.L. la empresa de la familia Ardid Martínez-Bordiú, los herederos del dictador.

El acuífero y las huertas tienen difícil convivencia con un proyecto que el BOJA define como Centro Internacional de Alto Rendimiento en Deportes Extremos y e-Sports, con espacios dedicados al bienestar y entretenimiento, alojamiento, restauración y comercio. La Junta señala la inversión “significativa de 267 millones de euros para un complejo de más de 1.3 millones de metros cuadrados” que generará 750 empleos directos.

Pero la estrategia de la Junta de Andalucía cuenta con numerosos detractores. La creación del macro-complejo frenaría el drenaje hacia el acuífero de Sierra Blanca. La masa de agua tiene un estado bueno, aunque las asociaciones ambientalistas de la zona advierten de signos de escasez en el río Nacimiento, venido a menos. La urbanización contribuiría a la impermeabilizando la superficie y alterará la actividad rural.

“Con el agua no se juega”

Desde la oposición, el secretario general del PSOE de Málaga, Dani Pérez rechaza el proyecto de la familia Franco que “pone en riesgo el futuro de Cóin”, haciendo una analogía con la gestión ambiental e hídrica de Doñana, donde “están esquilmando el parque nacional, y aquí en Coín quieren hacer algo parecido”.

Desde las filas socialistas señalan el interés especulativo que hay tras la recalificación de 135 hectáreas que afectarán al agua que abastece a los vecinos de Coín, “agua que sale del grifo, ya está bien de las mentiras de Juanma Moreno Bonilla”.

También se referían a la coyuntura actual de sequía desde el PSOE local, “nos parece una barbaridad, en la situación en que nos encontramos actualmente, con los recursos hídricos tan limitados, que se plantee esta actuación”, dice Salvador Rojas, portavoz coíno socialista.

Desde el resto de agrupaciones progresista alertan también del desmán estratégico que la Junta se dispone a acometer. El coordinador general de IU Andalucía, Toni Valero, señala que "una vez más, el gobierno de Juanma Moreno da prioridad a grandes proyectos urbanísticos que comprometen la sostenibilidad hídrica".

Modesto González, Coordinador Nacional de AxSí afirma que “Moreno Bonilla apuesta por la Andalucía del pelotazo urbanístico, por el enriquecimiento de las empresas insaciables, por esquilmar nuestros recursos naturales universales para convertirlos en recursos económicos de una élite”.

Hacia una nueva Plataforma

En Coín, esta historia ya es habitual, hace tres lustros las sociedad civil y colectivos agrarios se movilizaron contra otro proyecto deportivo y urbanístico que incluía más de mil viviendas y dos campos de golf. Ahora, el nuevo proyecto lleva la impronta de la familia Franco y está consiguiendo articular un frente común de resistencia al proyecto que integra a numerosas entidades civiles y ambientalistas.

“Este proyecto es una locura, en el contexto de sequía en el que estamos se van a terminar cargando toda la huerta de Coín”, dice Librada Moreno, de Ecologistas en Acción (EeA) Málaga, en conversaciones con ElPlural.com.

Jaime y Javier Ardid Martínez-Bordiú son bisnietos del dictador Francisco Franco, conocidos por su actividad en el parque residencial y hostelero de lujo. Ahora, promueven proyectos para la celebración de deportes como el wakeboard, kitesurf, skateboard, e-buggies, MTB, rafting, rápel y salto base, además de e-sports en Málaga, a minutos de la Costa del Sol, pero junto al Parque Nacional de la Sierra de las Nieves. Pero tras el espejismo deportivo hay un desarrollo urbanístico que reconecta a la región con los años del ladrillo.

Desde la Junta de Andalucía recuerdan que la inclusión del proyecto en la Unidad Aceleradora de Proyectos de Interés Estratégico no exime de la expedición de una autorización ambiental unificada, pero muchas voces en la región se plantean cómo es posible que un proyecto de estas características haya llegada tan lejos.