Pedro Morenés: ¿Qué es eso de poner a una mujer (catalana y embarazada) al frente de los Ejércitos del país? Todo el mundo sabe que lo de Ministerio de Defensa es un eufemismo para llamar al antiguo Ministerio de la Guerra. Menesteres para lo que hace falta gente sin escrúpulos, y qué mejor que el exdirectivo de una empresa especializada en la fabricación de bombas de racimo.

No se dejen engañar por su cara, mezcla de susto y sorpresa. Morenés fue consejero de la empresa Instalaza, la empresa que demandó al Estado español después de que el Gobierno de Zapatero firmara un acuerdo internacional que prohibía el uso de esas bombas. Unas armas que no hacen distingos a la hora de mutilar a un soldado o matar a un niño. La empresa pide 40 millones de euros al Estado en concepto de indemnización. El Gobierno de Rajoy ha accedido a pagarla (¡Oh, sorpresa!), pero lo hará a través de una curiosa estratagema. ¿Alguien ha dicho “conflicto de intereses”? No en Españistán. Nota CIS: 3.74

Ana Pastor: Fue la última ministra de Sanidad del último gobierno del Partido Popular. Durante la oposición fue responsable de Sanidad del PP. Todas las quinielas la situaban en esa parcela en el Arca de Mariano Noé, así que cuando Rajoy leyó su nombre para la cartera de Fomento, muchos murmuraron en la sala de prensa: creían que el presidente se había equivocado al leer la lista. ¡Pero en algún sitio no muy complicado había que colocar a Ana Mato!

Pastor se veía en Sanidad incluso una semana antes de las elecciones. De hecho, en su Twitter publicó una frase que ahora, vista con perspectiva, tiene su gracia: “Mientras voy en el coche, un mensaje: la sanidad que propone el PP es pública, universal y gratuita. Que nadie tenga ninguna duda sobre esto”. En su nueva labor, su mayor logro es el de otorgar un rescate de casi 4.000 millones de euros para las autopistas de peaje ruinosas que nadie usa. Por comparar, la misma cifra que supondrá quitar las pagas de Navidad a todos los médicos, profesores, policías, militares… Nota CIS: 4.04

Cristóbal Montoro: Otro que vuelve a la misma cartera que tenía en 2004, como si aquí no hubiera pasado nada. En los últimos años de oposición de Rajoy, Montoro volvió a tener protagonismo en el Congreso de los Diputados. Tanto que llegó a presionar a los otros partidos para que votaran contra el plan de ajuste de Zapatero para poder tumbar al Gobierno socialista. “Que caiga España, que ya la levantaremos nosotros”, dijo a la portavoz de Coalición Canaria. Pues España ya ha caído, pero se desconoce cuando van a empezar a levantarla.

Al finalizar el Gobierno de Aznar, Montoro se montó una asesoría en la que invertir sus conocimientos como exministro de Hacienda. Desde allí echaba un cable a los más pudientes para que pagasen los mínimos impuestos imposibles. Por lo visto, se le ha quedado un tic de entonces que le ha llevado a crear una vergonzosa amnistía fiscal. Ahora, el Estado español blanquea el dinero del narcotráfico, la prostitución y la corrupción a un interés mucho más bajo que el que ofrecen las mafias especializadas en tan turbias labores. Nota CIS: 3.77

Alberto Ruiz-Gallardón: El moderado y centrista del Partido Popular se  quitó la careta cuando consiguió su ansiado puesto a nivel nacional. El infiltrado rojo llegó al Ministerio de Justicia para volver a criminalizar a las mujeres que deciden abortar. Porque si no eres madre, no eres “mujer-mujer”. Eso sí, si luego te divorcias de tu marido, Gallardón no cree que tengas derecho a cuidar de tus hijos, por lo que es partidario de imponer por ley la custodia compartida.

El campeón de España de la deuda municipal escapó de su palacio de Cibeles sólo seis meses después de ser relegido, y los madrileños tuvieron que comerse con patatas a Ana Botella. Sólo un mes antes de que huyera, Gallardón decía en el Ayuntamiento: “No tengo prevista cosa distinta que terminar mi mandato como alcalde de Madrid”. Semejante regate dialéctico debió ser el que le hizo ganar puntos con Rajoy, que después usó el truco para decir que “no tengo previsto subir el IVA” o “no tengo previsto abaratar el despido”. Nota CIS: 4.31

José  Manuel García Margallo: Ante el grupo de rescatados del anterior gobierno de José María Aznar, los aduladores mediáticos pusieron el foco de la excelencia en este político por su perfil internacional y económico. No en vano cargaba a sus espaldas casi veinte años en el Europarlamento, donde fue durante mucho tiempo vicepresidente de la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios.

Pero todo se desvaneció cuando abrió la boca, como en el chiste. No llevaba ni un mes en el cargo cuando le soltó a un eurodiputado británico, y delante de todas las cámaras en Estrasburgo, un "¡Gibraltar español!". Toda una declaración de intenciones de su nefasta gestión, que ha provocado enfrentamientos en el Peñón. Su empeño por relanzar la "Marca España" le ha llevado a poner al frente de esta iniciativa a otro "patriota" con la misma incontinencia verbal que la suya. Nota CIS: 3.96

Jorge Fernández Díaz: El actual ministro del Interior tuvo que abandonar sus tertulias en La Ventana de la Cadena SER ante el "llamado del deber" de Mariano Rajoy. En aquellos debates se batió a capa y espada para defender los continuos casos de corrupción que acorralaban a los miembros de su partido. Y debió tomar buena nota de todo porque a su llegada a Interior se produjo en el Ministerio una purga general para apartar a todos aquellos responsables que habían investigado a sus camaradas.

Nombrado "el peor ministro del Interior" por el Sindicato Unificado de Policía, lo que más se recordará de Fernández Díaz es cómo convirtió este Ministerio en una filial más del Opus Dei. Tal y como desvelamos en este periódico, existen en Interior listas de los candidatos idóneos para ocupar puestos de responsabilidad. En ellas, los aspirantes son clasificados por colores: "Amarillos, del Opus y del PP; azules, del PP; blancos…”. Nota CIS: 3.63

Y las aguas de la crisis subieron mucho sobre España, y todos los trabajos y oficios fueron cubiertos por la depresión. Y sucumbió todo lo que trabaja en el país, así como funcionarios, jubilados, estudiantes, mineros y parados. Y todo aquello que no fue cubierto por las aguas de la crisis, fue aplastado por el arca de Mariano Noé, que avanzó con ritmo constante a golpe de hachazo.

Cuando el Noé original se subió a su arca, tenía 600 años, según la Biblia. A este paso, Rajoy no cumple doce meses en el cargo.

Marcos Paradinas es redactor jefe de El Plural
En Twitter es @mparadinas