El PSOE, que ya incluyó en su programa electoral la propuesta de una ley hipotecaria para regular la dación en pago, propone que durante dos años las personas afectadas solo paguen la mitad de los intereses de la hipoteca y nada del principal del crédito. A partir de aquí podría pagar un alquiler económico por tres años para evitar el desahucio.

Los bancos no tendrían que pagar transmisiones patrimoniales
Los socialistas plantean que, “para estimular” a los bancos a que acepten zanjar la deuda quedándose con la casa, se les exima, a cambio, de pagar el impuesto de transmisiones patrimoniales. Una medida que significaría una merma de ingresos para las comunidades.

20.000 beneficiados frente a 100.000 desahucios
El diputado socialista y portavoz de Economía del Grupo socialista, Valeriano Gómez, sostiene que, con los baremos que ha establecido el Gobierno en su código de buenas prácticas dirigido a las familias “en riesgo de exclusión” y con hipotecas inferiores a 200.000 euros, los beneficiarios serán no más de 20.000 personas al año, frente a los 100.000 desahucios anuales, por lo que el PSOE propone subir el umbral “como mínimo” a los 300.000 euros.

Tasaciones independientes
El PSOE formula, además, que las tasaciones de las viviendas sean, por ley, independientes, es decir, que no las hagan los bancos, para que no se puedan rebajar antes de cinco años y que, en caso de ejecución hipotecaria, al entregar la casa al banco la tasación no baje del 80% del valor original. También propone limitar las penalizaciones por cancelación anticipada.

La Izquierda Plural propuso crear un mecanismo para la dación en pago
El Grupo Parlamentario de IU, ICV-EUiA, CHA (Izquierda Plural) presentó una moción el pasado 2 de marzo en la que pidió crear en el plazo de tres meses un procedimiento rápido y económico que permita a las familias la dación en pago, sea cual fuere el momento en que suscribieron la hipoteca y el momento en que entraron en morosidad.

La opción de alquiler para afectados
La Izquierda Plural también proponía incentivar que la vivienda dada en pago pueda seguir siendo utilizada “durante un período determinado por sus anteriores propietarios a través de un contrato de alquiler o de cesión temporal de uso, en unas condiciones acordes con su capacidad adquisitiva”.

Un parque de viviendas de los bancos participados por el FROB
Además, planteó utilizar el “stock de viviendas” en manos de entidades participadas por el FROB para “la creación de un parque de vivienda que se ponga a disposición de las familias que hayan sufrido proceso de ejecución hipotecaria de su vivienda habitual y no dispongan de recursos suficientes”.